Así se trasladan las obras de arte más valiosas del mundo: "Blindajes, GPS y confidencialidad total”
La Policía investiga la desaparición de un cuadro de Pablo Picasso durante su traslado desde Madrid a Granada. El pequeño lienzo "Naturaleza muerta con guitarra", nunca llegó a su destino
Sevilla - Publicado el
5 min lectura
Parece una historia de espías. Un guión de cine de ficción. Una novela al más puro estilo Le Carré. De esas que mezclan arte, intriga y un misterio que parece imposible. Pero no es ficción.
La Policía Nacional busca un cuadro de Pablo Picasso desaparecido durante su traslado desde Madrid hacia Granada para una exposición. La pieza, propiedad de un coleccionista privado, fue cedida para ser mostrada en una muestra temporal… pero nunca llegó.
Traslado de la pintura de Caravaggio 'Santa Catalina de Alejandría' desde el Museo Thyssen a Roma
Cuando los organizadores comenzaron a desembalar las obras en destino, descubrieron que algo no iba bien: el cuadro de Picasso no estaba en el camión. Y desde entonces, ni un solo rastro. Solo una pregunta que hoy sigue sin respuesta: ¿Dónde está la obra de Picasso?
Una desaparición “de película”
La historia tiene todos los ingredientes de un guion de James Bond: un cuadro de valor incalculable, un traslado entre ciudades, medidas de seguridad, y un punto en el camino en el que algo —o alguien— cambió el destino de la obra.
El lienzo desaparecido es Naturaleza muerta con guitarra, pintado por Pablo Picasso en 1919, una joya del periodo cubista del artista malagueño. Tiene un diminuto tamaño —apenas 12 por 9 centímetros, como una servilleta—, y está asegurado en 600.000 euros.
¿un robo planificado? ¿Un error logistico?
Según fuentes próximas a la investigación, la obra salió de Madrid junto al resto de piezas de la exposición, pero no estaba dentro del vehículo que llegó a Granada. ¿Entonces qué pasó con el cuadro? ¿Cómo se pierde una obra de arte? ¿Realmente es tan sencillo?
Nada se deja al azar. Todo se hace con empresas especializadas
No se descarta ninguna hipótesis: un robo planificado, un error logístico, o incluso un cambio de embalaje que podría haber desviado el cuadro a otro almacén por accidente. Por ahora, solo hay una certeza: el lienzo no está donde debería estar. “Nada se deja al azar en un traslado de arte”
el traslado de obras de arte: un proceso al milímetro
En COPE Andalucía hemos querido ir más allá del misterio y entender cómo se transportan obras de arte de un valor incalculable, como un cuadro de Picasso, una escultura de las que se muestran en el Louvre o un retablo del Museo del Prado. ¡Y es que hasta La Gioconda fue víctima de un robo!
Para saber más de este tema, hablamos con Pablo González Pola de la Granja, profesor de Gestión de Patrimonio Histórico en la Universidad CEU San Pablo, quien nos cuenta que el traslado de una obra de arte es un proceso complejo, minucioso y cargado de protocolos.
de clavo a clavo
“Nada se deja al azar. Todo se hace con empresas especializadas, embalajes diseñados a medida y medidas de seguridad que incluyen control de temperatura, humedad y vibraciones”, nos cuenta en los micrófonos de COPE Andalucía.
La Gioconda también fue víctima de un robo en 1911
Las piezas viajan aseguradas “de clavo a clavo”, una expresión que significa que el seguro cubre la obra desde que se descuelga en el lugar de origen hasta que se cuelga en el destino final. En algunos casos, un técnico del museo acompaña físicamente la obra durante todo el trayecto para garantizar que no se manipula ni se expone a riesgos innecesarios”, explica.
Vehículos blindados y control por GPS
Cuando se trata de obras de gran valor —como este Picasso—, el transporte se realiza en camiones blindados y climatizados, equipados con sistemas de geolocalización GPS y personal de seguridad privada.
“La normativa establece que, si el valor de la obra supera los 125.000 euros, el vehículo debe ser blindado”, recuerda González Pola. Además, el interior del camión mantiene una temperatura y humedad estables, y su amortiguación evita cualquier tipo de vibración que pueda dañar las piezas.
Durante el traslado, la obra viaja en embalajes diseñados a medida en camiones donde controlan la temperatura y la humedad
Profesor de Gestión de Patrimonio Histórico en la Universidad CEU San Pablo
Los trayectos se planifican al milímetro: rutas discretas, horarios cambiantes, confidencialidad total y acompañamiento policial si el valor supera ciertos umbrales. Por eso, la desaparición de una obra en estas condiciones resulta especialmente extraña a los expertos.
“Es muy difícil que un cuadro se pierda en un transporte de este tipo. Todo está inventariado, registrado, asegurado… y supervisado por profesionales. Tiene que haber habido un fallo humano o una manipulación intencionada”, apunta el experto.
traslados confidenciales
La investigación policial, según ha podido saber COPE Andalucía, se centra en el momento exacto en que el cuadro salió del depósito del coleccionista en Madrid. También se revisan las cámaras de seguridad del transporte y los listados de personal que intervino en el embalaje y carga.
El Museo del Prado, una de las pinacotecas más importantes del mundo
El seguro —de 600.000 euros— cubre la pérdida económica, pero no el valor artístico ni emocional de una obra de Picasso. Las compañías aseguradoras, de hecho, suelen exigir cláusulas de confidencialidad a las partes implicadas para proteger tanto la identidad del propietario como los detalles del traslado.
obras de arte bajo lupa
“En muchos casos, ni siquiera los trabajadores de las empresas de transporte saben qué obra están moviendo. Las cajas van numeradas y sin identificar”, explica González Pola. Ahora los investigadores trabajan con un mapa claro: el recorrido del convoy que transportaba las obras desde Madrid hacia el sur. Sin embargo, en algún punto entre la capital y Andalucía, la pista se pierde.
Más allá del robo, este suceso reabre un viejo debate: ¿están suficientemente protegidas las obras de arte en sus traslados? España cuenta con empresas punteras en transporte especializado, pero los expertos advierten de que la seguridad total no existe.
“A veces se asume que con cajas especiales y seguros millonarios es suficiente, pero no siempre se contemplan todos los riesgos. El arte tiene un mercado negro muy potente, y cualquier información filtrada puede poner en riesgo una pieza”, explica el profesor González Pola.
EL MISTERIO CONTINÚA
En ese mercado negro, obras de pequeño formato —como esta de Picasso— son especialmente vulnerables: fáciles de ocultar, difíciles de rastrear y muy codiciadas por coleccionistas clandestinos.
Por ahora, Naturaleza muerta con guitarra sigue desaparecida. ¿Dónde está el cuadro? ¿Fue un robo calculado o un error imposible? Solo el tiempo (y la investigación policial) podrán responderlo.