Estarás de acuerdo conmigo en que uno de los grandes misterios de la humanidad que está aun por resolver es qué pasa con los calcetines perdidos en la lavadora. ¿Qué es de ellos? ¿Donde acaban? ¿Son devorados en el centrifugado o desaparecen sin más?

Según los datos de un estudio publicado hace algunos años, todos, sin excepción, perdemos algún calcetín en algún momento de nuestras vidas. Es más. Este estudio desvela que el ser humano pierde al menos un calcetín al mes sin saber cuando o donde, lo que se traduce en casi 1300 calcetines a lo largo de nuestra vida. Si lo traducimos en euros, los calcetines huérfanos nos cuestan más de 3000 euros. Ahí es nada.

Y claro, uno se pregunta ¿a donde van esos calcetines perdidos? Aquí es donde viene el lío, ya que nuestra predisposición a perder calcetines forma ya parte de nuestra vida cotidiana y damos por asumido, por normal, que esas cosas pasan, sin saber muy bien porqué. Tanto es así que cada 9 de mayo se celebra el Día Mundial de los Calcetines Perdidos, ya sean blancos, negros, de colores de deporte, con dibujos, de rayas, rombos, cuadros...

Algunas veces basta con mirar detrás del radiador donde pusiste el tendedero portátil, otras veces simplemente hay que asomarse al patio de luces para ver que alguno de tus calcetines ha caído sin tú percatarte porque se había “escondido” en la manga de una camisa o en el pantalón vaquero o simplemente se había enredado con cualquier prenda. Otras veces, es cierto que la lavadora se los traga literalmente y sueles aparecer en el filtro o bajo el caucho del tambor de lavado o que incluso se salga del tambor si bien esto último es poco probable aunque puede ocurrir.

El caso es que unos científicos aseguran saber qué hay detrás del misterio de los calcetines. Tanto es así que incluso han ideado una fórmula para predecir qué es lo que hacemos para nuestros calcetines pierdan su pareja... misteriosamente...

El psicólogo Simon Moore y el estadístico Geoff Ellis, responsables de elaborar el estudio financiado por Samsung, aseguran tener la fórmula a la que han llamado “indice de pérdida de calcetines” y que parece dar respuesta a todas tus preguntas sobre este misterio. Toma nota:

(L (p x f) + C (t x s) ) - (P x A)

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• L: Tamaño de la colada. Se calcula al multiplicar el número de personas en el hogar (p) por la cantidad de lavados que realiza en una semana (f)
• C: Complejidad del lavado. Esta se calcula multiplicando en este caso el número de diferentes tipos de lavados blancos y oscuros que hacemos a lo largo de una semana (t) por el número de calcetines lavados durante esos siete días (s)
• P: Positividad con la que ponemos la lavadora. Para esto se mide en una escala de 1 a 5, siendo 1 "fuerte rechazo (no nos gusta nada)" y 5 "gran disfrute (poner la lavadora es lo nuestro)"
• A: Atención prestada. Se calcula según precauciones tomadas al comienzo de cada lavado. Es decir, revisar los bolsillos, desenrollar las mangas, dar la vuelta a la ropa...

No obstante existen algunos consejos básicos para evitar hacer cualquier tipo de ecuación que resuelva el misterio y que te ayudarán a conservar tu par de calcetines unidos para siempre:

• Lávalos siempre juntos en una bolsa o red con cremallera
• No los mezcles juntos con el resto de la colada
• Mantenlos unidos por parejas tanto en el lavado como al tenderlos
• Revisa bien el tambor de lavado y sus junta de goma
• Asegúrate de que entran y salen juntos de la lavadora