INDUSTRIAS ALGAMA inició su actividad industrial en el año 1966, con una planta de galvanizado en caliente y con el objetivo de cubrir las necesidades de METALÚRGICA SANTA ANA S.A., en relación con las piezas galvanizadas de la carrocería del vehículo Land Rover.

Este objetivo determinó que la planta fuera de dimensiones pequeñas, cuba de 3 metros de longitud. Posteriormente se produjo el traslado a unas nuevas instalaciones con el fin de ampliar el mercado hacia otras aplicaciones. En esta etapa, las instalaciones abarcaban 10.000 metros cuadrados. En ellos se instaló la planta de galvanizado con una cuba de inmersión de 7 metros de longitud.

Durante este tiempo Industrias Algama basando su estrategia en una calidad incuestionable de su producto, una esmerada atención al cliente y un servicio rápido y eficaz, consolida su posición en el mercado pasando a ser una de las empresas referentes en lo que a recubrimientos superficiales se refiere.

Esta posición de privilegio queda reflejada en el considerable aumento de su cartera de clientes y en participar desde sus inicios en la asociación técnica española de galvanización (ATEG) con el número 8 de las empresas del sector, llegando INDUSTRIAS ALGAMA a ostentar la presidencia de la Asociación Técnica Española de Galvanización y por ello una vocalía de la Asociación Europea de Galvanización con sede en el Reino Unido.

En el año 1980, INDUSTRIAS ALGAMA es homologada por el Ministerio de Industria y Energía con certificaciones bianuales que así lo acreditan. La empresa inicia a principios de los años 90 la modificación de sus normas de calidad para la implantación de un Sistema de Aseguramiento de la Calidad de acuerdo a las normas internacionales, culminando en el año 1994 el objetivo de ser una de las primeras galvanizadoras de España en estar acreditada en la norma ISO 9001 por Bureau Veritas Internacional, y estableciendo la diferencia respecto a la competencia por calidad del producto y servicios.

Adicionalmente, con visión de la incidencia que iban a tener las nuevas tecnologías de la información, se lanza en la informatización de la empresa en todos los ámbitos, implantando sistemas informáticos personalizados de gestión interna que nos permiten un control y trazabilidad sobre el producto que aportando un valor adicional para nuestros clientes.

Llegados al nuevo milenio, debido al crecimiento de la ciudad de Linares, la empresa se encuentra inmersa dentro del mismo casco urbano, lo que dificulta los transportes y con unas instalaciones que comienzan presentar síntomas de envejecimiento. Se emprende por tanto un ambicioso proyecto. El nuevo traslado de las instalaciones a una nueva ubicación.

A primeros del siglo XXI, en septiembre de 2007, se inauguran las actuales instalaciones que significaron un antes y un después en la evolución de la Compañía, aportando una serie de ventajas competitivas.