Vinculan la mayor fuerza muscular durante el envejecimiento con un cerebro más saludable

Un estudio internacional con mayores de 65 años ha demostrado la vinculación entre la condición física y un cerebro más saludable, ya que los mayores con fuerza en el tren superior presentan mayores volúmenes de materia gris y más flexibilidad cognitiva.

Investigadores de la Universidad de Granada y del Hospital Universitario Virgen de las Nieves, en colaboración con expertos internacionales, han demostrado que la fuerza muscular de los adultos mayores de 65 años que no presentan deterioro cognitivo se relaciona con una mayor materia gris cerebral.

Según el estudio, es la fuerza de prensión manual o tren superior la que muestra una relación con mayores volúmenes de materia gris en áreas corticales y subcorticales del cerebro, y es en la memoria de trabajo espacial o en la flexibilidad cognitiva donde mejores consecuencias tiene.

Este trabajo, que publica la revista Scandinavian Journal of Medicine & Science in Sports, forma parte del ensayo aleatorio controlado que incluye a 90 adultos mayores cognitivamente sanos, algo más de la mitad mujeres.

El proyecto AGUEDA está liderado por la investigadora Ramón y Cajal del Departamento de Educación Física y Deportiva de la Facultad de Ciencias del Deporte y del Instituto Mixto Universitario Deporte y Salud (iMUDS) de la Universidad de Granada Irene Esteban Cornejo.

La científica ha destacado el vínculo entre la fuerza muscular y la salud cerebral, brindándole importancia a la interacción músculo-cerebro como una estrategia prometedora para mejorar la función cognitiva en esta población adulta.

"Una mayor fuerza muscular durante el envejecimiento podría tener un impacto protector en la salud cerebral, en la cual la fuerza de agarre manual, una medida rápida, económica y reproducible, parece ser el indicador más sólido para predecir el volumen de materia gris en diferentes regiones cerebrales en esta población", ha añadido la autora principal del estudio, Andrea Coca-Pulido.

El estudio ha desarrollado una intervención de fuerza muscular de seis meses para examinar si las mejoras en fuerza muscular tras el programa de ejercicio producen beneficios a nivel de estructura y función cerebral y cognitiva en adultos mayores, e identificar los mecanismos de acción que subyacen a estas mejoras.