Tachuelas con QR y nuevas reglas para veladores: el plan que cambiará las terrazas en Córdoba
La nueva ordenanza, que se debatirá este jueves, apuesta por el equilibrio entre negocio y convivencia, con medidas inéditas que entrarán en vigor en 2026
Córdoba - Publicado el - Actualizado
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Este jueves, 3 de julio, se celebrará en Córdoba una nueva sesión de la conocida como “mesa de veladores”, un foro que reúne a representantes del Ayuntamiento, hosteleros y otros agentes implicados. En ella se presentará el borrador de la nueva ordenanza que regulará la ocupación del espacio público por terrazas y veladores, un documento de 47 páginas elaborado por los técnicos de la Gerencia Municipal de Urbanismo que supone, según sus impulsores, un cambio profundo en la forma de entender la hostelería al aire libre en la ciudad.
No será una aprobación definitiva. El texto se debatirá con los sectores implicados y volverá a la mesa en septiembre, con la previsión de que entre en vigor en 2026. A partir de entonces, todos los locales que deseen instalar veladores deberán acogerse a las nuevas bases, que traen consigo importantes novedades.
La más llamativa, quizá, es la incorporación de pequeñas tachuelas en el suelo para señalar con exactitud los límites de cada terraza. Estas marcas metálicas, similares a las del carril bici, pero sin sobresalir del firme, delimitarán los cuatro vértices del espacio autorizado y contarán con un código QR. De este modo, los agentes de la Policía Local podrán escanear el código y comprobar al instante si la instalación cumple con la autorización concedida.
Además, las licencias dejarán de otorgarse en función del número de veladores o mesas y pasarán a basarse en los metros cuadrados asignados a cada establecimiento. La prioridad será para el peatón, y la ocupación del espacio público estará claramente delimitada. Esta reorganización pretende facilitar el control, evitar sanciones y garantizar la convivencia entre vecinos, clientes y negocios.
Otra de las medidas destacadas es que las autorizaciones serán concedidas por un periodo de cuatro años y se aplicará una reducción del 25% en la tasa que abonan los hosteleros. También se regula el uso de elementos como separadores, mamparas y calefactores, prohibiéndose expresamente el uso de gas, aunque sí se permitirán otros sistemas de climatización que cuenten con regulación específica.
La nueva normativa reserva un artículo completo a la lucha contra la contaminación acústica, uno de los puntos más sensibles en muchas zonas de la ciudad. Aunque se introduce cierta flexibilidad en aspectos como la recogida de los elementos de terraza, se aplicará un enfoque más restrictivo en espacios especialmente conflictivos como la plaza de la Corredera, calle La Plata o las Tendillas, donde el objetivo será alcanzar consensos con los propios hosteleros para limitar el número de terrazas y ordenar su distribución.
Miguel Ángel Torrico, presidente de la Gerencia Municipal de Urbanismo, ha asegurado que este borrador “no es el paso definitivo, pero sí un gran paso para que sea una realidad”. Según sus palabras, el nuevo modelo cuenta con un amplio consenso entre todas las partes implicadas, y responde a una demanda ciudadana cada vez más frecuente: regular para convivir.
Torrico también ha recalcado que el objetivo de la nueva ordenanza no es recaudatorio, sino de control. Actualmente, la Policía Local tramita numerosas denuncias contra locales que incumplen la normativa vigente. Cuando se produce una queja, los agentes acuden al establecimiento y, si detectan infracción, abren expediente sancionador, con tipificaciones que pueden ser leves, graves o muy graves.
El nuevo marco legal aspira a simplificar este proceso. Con las nuevas herramientas tecnológicas, como el QR en las tachuelas, el control será más rápido y transparente, tanto para la administración como para los empresarios y vecinos.
La ordenanza también incorpora medidas relacionadas con la calidad del aire, en línea con los controles de contaminación a usuarios que coordina la Junta de Andalucía y que actualmente se encuentran en su primer año de implantación experimental.
TASA DE VELADORES
La próxima modificación de las ordenanzas fiscales incluirá una rebaja del 25% en la tasa de veladores, con el objetivo de ordenar el uso del espacio público, no de recaudar. Además, la autorización para instalar terrazas tendrá una vigencia de cuatro años y no requerirá renovación anual, siempre que no cambien las condiciones iniciales. En caso de modificaciones, sí será necesaria una nueva autorización.
Se mantiene la obligación de retirar diariamente el mobiliario de la vía pública, salvo excepciones reguladas para elementos como mamparas o separadores, que deberán contar con autorización expresa de la Gerencia de Urbanismo. Se busca así mayor estabilidad y flexibilidad para los hosteleros.