Llega la primavera y con ella la temida alergia que tantas personas sufren. Este tipo de alergia afecta a cerca de 8 millones de españoles, según la Sociedad Española de Alergología e Inmunología Crónica (SEAIC), dándose con mayor frecuencia en ambientes urbanos que rurales ya que la contaminación atmosférica favorece su efecto. Pero no solo la contaminación es un agente potenciador, también el estar menos en contacto con la naturaleza, los animales y tener unos hábitos de limpieza extrema, ayuda a favorecer la alergia.
Las alergias se puede convertir en una pesadilla cuando se sufre de ojos llorosos, fuertes picores, estornudos e incluso picores de garganta o dificultad al respirar. En España, el polen de las gramíneas -familia de plantas herbáceas con cerca de 12.100 especies descritas- se esconde detrás de la inmensa mayoría de las alergias primaverales.
La alergia al polen se puede tratar a través de la inmunoterapia, más conocida como vacuna de la alergia o bien con los antihistamínicos.