La Delegación Diocesana de Manos Unidas en Jerez ha elegido a María Asunción Delage Comella como nueva presidenta-delegada. Sucede a Mercedes Gómez cuyo mandato de tres años ha concluido.
Afronta una etapa compleja en la que el diseño de las obras en Latinoamérica, África y Asia que se costeen, la búsqueda de fondos para ello y, especialmente, la visita a esos países para comprobar el desarrollo de los proyectos se hace especialmente difícil por los obstáculos de la pandemia.
Delage aborda su cometido, pese a todo, con gran ilusión y compromiso con esos lugares del mundo más desfavorecidos y con el sentido confesional que las impulsa.