• Jueves, 18 de abril 2024
  • ABC

COPE

Cultura

¿Por qué lloró Julio César en Cádiz?

El Templo de Melkart, conocido como Templo de Hércules gaditano, era famoso en todo el mundo antiguo porque se decía que guardaba una parte de las cenizas del propio Hércules

Templo de Hércules (Cádiz)

Templo de Hércules (Cádiz)

Fernando Crespo

Tiempo de lectura: 2'Actualizado 09:19

Cayo Julio César, el hombre cuyo apodo ha llenado de grandeza los sueños de tantos poderosos, derramó lágrimas de desesperación y rabia frente a las costas de Cádiz ¿Por qué? Para acercarnos a esta curiosa historia, debemos antes acudir a las fuentes antiguas, a Suetonio y Dion Casio, historiadores de la Antigua Roma que nos transmitieron esta anécdota de la vida del gran Julio.

Estatua del Emperador Julio César

Estatua del Emperador Julio César


Los hechos se remontan al año 68 antes de Cristo, cuando siendo quaestor de la Hispania Ulterior, Cayo Julio César acudió a visitar el Templo de Melkart, actualmente conocido como Castillo de Sancti Petri, situado en el islote del mismo nombre frente a las costas de las localidades de San Fernando y Chiclana de la Frontera.


Templo de Hécules, también conocido como Castillo de Sancti Petri, entre Chiclana y San Fernando (Cádiz)

Templo de Hécules, también conocido como Castillo de Sancti Petri, entre Chiclana y San Fernando (Cádiz)


El Templo de Melkart, también conocido como Templo de Hércules gaditano, era famoso en todo el mundo antiguo porque se decía que guardaba una parte de las cenizas del propio Hércules, era un famoso centro de interpretación de los sueños, y porque se podía contemplar una gran estatua de Alejandro Magno.

Y fue al contemplar esa gran estatua del rey macedonio, cuando Julio rompió a llorar desconsolado porque a la misma edad que tenía Alejandro cuando murió, él no había hecho nada importante, nada que ni siquiera se acercase a las hazañas de su héroe.

Antigua imagen del Castillo de Sancti Petri (Cádiz) 1912

Antigua imagen del Castillo de Sancti Petri (Cádiz) 1912


No obstante, aquella misma noche, Julio César tuvo un perturbador sueño en el que violaba a su propia madre. El oráculo del templo de Melkart lo interpretó como que su madre era la tierra, a la que él dominaría y obtendría notables éxitos militares y políticos que le llevarían a convertirse en el gran Julio César.

  • Left6:No existe configuración de publicidad para el slot solicitado

Y así fue, efectivamente, al menos hasta los famosos idus del mes de marzo del año 44 a. C., pero eso, eso es otra historia que solo confirma que las lágrimas que Julio César derramó frente a las costas de Cádiz le condujeron a la gloria y el triunfo.

Anocheciendo en el Templo de Hércules - Castillo de Sancti Perti (Cádiz)

Anocheciendo en el Templo de Hércules - Castillo de Sancti Perti (Cádiz)



Radio en directo COPE
  • item no encontrado

En directo