Jornada copera de estrenos y de ilusiones para Lleida y Formentera

El Atlético de Madrid comenzará el año 2018 con la ida de los octavos de final de la Copa del Rey ante el Lleida, donde viajará con sus dos fichajes, el delantero hispanobrasileño Diego Costa y el extremo Víctor Machín 'Vitolo', que podrían debutar con el equipo, aunque ninguno será titular.

Las dos incorporaciones del club rojiblanco, inscritas una vez terminada la sanción de dos periodos sin fichar por parte de la FIFA, están en la lista de dieciséis futbolistas que ha elaborado el entrenador argentino Diego Pablo Simeone para visitar Lérida.

No obstante, ninguno de los dos estará en el once que sea titular en el Camp d'Esports de la capital ilerdense, ya que el entrenador argentino ensayó este martes con una alineación en la que optó por el francés Kevin Gameiro y Fernando Torres como delantera titular, por lo que los dos fichajes esperarán su momento en el banquillo.

El once del Atlético será el formado por el balear Miguel Ángel Moyá en la portería; una defensa con Juanfran Torres en el costado derecho, los centrales uruguayos Diego Godín y José María Giménez, y el francés Lucas Hernández como lateral izquierdo.

El mediocampo incluirá a Saúl Ñíguez, que no puede jugar en LaLiga por acumulación de amonestaciones, con el argentino Augusto Fernández en el medio, y las alas serán para el argentino Ángel Correa por la derecha y el belga Yannick Carrasco por la izquierda.

Fernando Torres, titular en los dos partidos de la eliminatoria ante el Elche, junto al francés Kevin Gameiro serán los delanteros, aunque en el banquillo esperarán Costa, Vitolo y el francés Antoine Griezmann, que también formará parte de la expedición rojiblanca.

Los que son baja segura son el centrocampista madrileño 'Koke' Resurrección, con problemas en uno de sus adductores, y el lateral izquierdo brasileño Filipe Luis, con una lesión muscular en los isquiotibiales del muslo derecho que le tendrá fuera de los terrenos de juego al menos una semana.

Para el Lleida Esportiu, cuya prioridad es clasificarse para el 'play-off' de ascenso a Segunda 'A', el partido de este miércoles se toma como una auténtica fiesta.

Los ilerdenses lograron la machada copera de 2017 al eliminar a la Real Sociedad en los dieciseisavos de final, en un segunda parte de locura donde asaltaron Anoeta.

La SD Formentera afrontará este miércoles (19.00 horas, Estadio Municipal de Sant Francesc) ante el Deportivo Alavés, actual subcampeón, otra cita histórica en la Copa del Rey, a la que acude tras eliminar al Athlétic Club de Bilbao en una de las grandes sorpresas del torneo.

Los formenterenses llegan al partido de ida de los octavos de final de la Copa pletóricos de moral y con el convencimiento de que pueden repetir ante el conjunto de Vitoria la gesta consumada frente a los "leones" (1-1 en la ida y 0-1 en la vuelta en San Mamés).

Para ello necesitan conseguir un resultado en su campo, de césped artificial y con gradas supletorias para albergar a unos 3.000 espectadores, que deje "viva" la eliminatoria con vistas al partido de vuelta en Mendizorroza.

El conjunto vitoriano se traslada a Baleares con la misión de obtener un resultado positivo que les permita cerrar la eliminatoria en Vitoria para pasar de ronda en una competición que trae grandes recuerdos a la afición vasca, tras alcanzar la final en la pasada edición.

Abelardo Fernández recupera jugadores, por lo que podrá introducir cambios en todas las líneas de su formación inicial, como la inclusión del internacional sub-21 Antonio Sivera en la portería.

Las Palmas y Valencia disputarán este miércoles en la Copa del Rey el primero de los tres partidos que les enfrentará durante enero con la atención centrada en ambos banquillos, con el estreno de Paco Jémez en el local y la ausencia de Marcelino García Toral en el visitante.

Mientras Jémez debuta en su segunda etapa en el equipo canario, al que apenas lleva entrenando una semana, Marcelino no viajará con la expedición valencianista -que se desplazará el mismo día del partido-, atendiendo así la recomendación de los médicos tras el accidente de tráfico que sufrió el pasado 23 de diciembre, en el que resultó herido leve.

De ese modo, la novedad no solo será el segundo entrenador valencianista, Rubén Uría, sino también Jémez y la revolución que ha supuesto su llegada, con varios fichajes confirmados y algunas decisiones que han sorprendido al propio club, como descartar al francés Rémy, máximo goleador del equipo, y al marroquí Tannane.

El nuevo técnico amarillo ya tiene a sus órdenes al centrocampista argentino Peñalba, al central andaluz Gálvez y al extremo cántabro Jairo, todos ellos peticiones suyas, aunque solo podría contar con el defensa, al no haber fichas disponibles aún para el resto.

El preparador, nacido en la capital grancanaria pero cordobés de adopción, solo tiene la baja por lesión del brasileño Míchel Macedo en una plantilla amplia, en la que además de Rémy y Tannane, a los que se les busca nuevo destino, habrá más bajas, como la del central Aythami Artiles, ya confirmada por el propio entrenador, para dejar sitio a nuevos fichajes en este "borrón y cuenta nueva" que ha hecho la Unión Deportiva con la llegada del nuevo año.

Para este encuentro, el Valencia no podrá contar con el defensa colombiano Jeison Murillo y el centrocampista Carlos Soler, ambos lesionados, al tiempo que recupera para este torneo a Geoffrey Kondogbia, que no pudo disputar por sanción la eliminatoria anterior ante el Zaragoza.

El resto de la plantilla ha vuelto al trabajo sin más problemas que las sanciones en Liga de Zaza y Montoya que no les impedirán jugar este encuentro.

El Sevilla inicia 2018 con la ida de los octavos de la Copa del Rey en el campo del Cádiz, un 'gallito' de Segunda, y lo hace con un nuevo entrenador, el italiano Vincenzo Montella, sustituto del argentino Eduardo Berizzo, y el reto de comenzar una nueva etapa con el derbi contra el Betis a la vista.

Los sevillistas, a los que la competición copera se les ha dado bien en los últimos años, con el título ganado en 2010 al Atlético de Madrid y la final perdida en 2016 ante el Barcelona, han tenido muy poco tiempo para asumir las ideas y métodos de Montella, pues el napolitano llegó el viernes y sólo ha dirigido cinco entrenamientos.

Tras cuatro partidos sin ganar -uno en la 'Champions' y tres en la Liga- que desembocaron en la destitución de Berizzo el 22 de diciembre, el Sevilla quiere estrenar esta nueva andadura con un triunfo que le refuerce el ánimo ante su gran compromiso del inicio del nuevo año, el 6 de enero en el Sánchez Pizjuán ante su 'eterno' rival, el Betis, al que precisamente el Cádiz eliminó de la Copa.

La llegada de Montella ha traído consigo una gran novedad en el equipo hispalense, pues parece haber recuperado a un referente como el francés Steven Nzonzi, que lleva casi un mes y medio sin jugar -siete partidos- tras una disputa con Berizzo y apunta a titular en el Carranza, tras lograr el italiano implicarlo en el proyecto.

Mientras, el Cádiz, segundo en LaLiga 1/2/3, mira más a la liga y a su objetivo de asegurarse la permanencia y luego luchar por volver a Primera, pero no renuncia a plantar cara a un rival de 'Champions' e intentar eliminar de la Copa al otro equipo sevillano, como hizo en la ronda anterior con el Betis (perdió 1-2 en la ida y ganó 3-5 en el Benito Villamarín), en una de las sorpresas de este torneo.

El conjunto entrenado por Álvaro Cervera se encuentra en puestos de ascenso a Primera División tras una racha espectacular entre noviembre y diciembre que le ha llevado a encadenar nueve partidos sin perder en LaLiga 1/2/3, con siete victorias y dos empates.