‘En el estanque dorado’: El grupo de teatro del Ateneo de Pozuelo regresa a los escenarios y representará la oscarizada pieza dramática el 24 de julio en El Pardo
¡Mis queridos palomiteros! Ateneo de Pozuelo llega a El Pardo con ‘En el estanque dorado’. Tras varios meses de ausencia obligada de los escenarios, a consecuencia de la pandemia COVID-19, regresa, poco a poco, la actividad al sector cultural.
De esta manera, el renombrado grupo de teatro –que pertenece a la Asociación Cultural del mismo nombre– se pone de nuevo en marcha con la oscarizada pieza dramática En el estanque dorado, tras los últimos éxitos cosechados, por ejemplo, con la escenificación de su último montaje, Arsénico por compasión.
Pues bien, el próximo 24 de julio, viernes, y a las 19 horas, los espectadores que lo deseen podrán disfrutar y revivir de nuevo En el estanque dorado, cuya representación se celebrará en el Centro Socio Cultural Alfonso XII, en El Pardo.
Como se sabe se trata de otro de los mejores trabajos del Ateneo de Pozuelo, por cierto muy celebrado, dado que han sido reconocidos con los premios principales, varias veces, los actores Milagros Morón y Luis Higueras.
Ateneo de Pozuelo llega a El Pardo con ‘En el estanque dorado’
En el estanque dorado nace del deseo expreso de la actriz Milagros Morón de llevar a las tablas tres constantes que le asedian: el conflicto intergeneracional que palpita en cualquier familia, el canto del cisne dirigido hacia la vida y la mezcla entre lo cómico y lo dramático que aporta cercanía a la pieza.
Tras hallar una copia en inglés del libreto -no existe un texto traducido al castellano-, Alberto Sesmero se encarga de traducirla y Euloxio Fernández de adaptarla, quien añadirá alguno de los diálogos que aparecen en la película, al considerar que amplifican el tono emocional, completando así ese extraño viaje que va del teatro al cine y, de nuevo, al teatro.
Se dice del teatro que es, sobre todo, escucha. Efectivamente, esta obra demuestra que el teatro es escucha, especialmente de la vida. Así, desde la escucha, se descubre que las olas de un lago son bramidos del viento cuyo sonido es muy diferente al del mar.
Se descubre también que un sencillo cuadro de una puesta de sol puede reflejar una bella imagen al contemplar el atardecer; se descubre, en fin, que el estanque es un proyecto abordado con y desde la sencillez, pero en el silencio de la escucha de la vida misma.
Desde que se fundó la Asociación Cultural Ateneo de Pozuelo en 1995, las conquistas cosechadas por esta formación teatral se han ido sucediendo hasta conseguir más de una docena de premios en diferentes certámenes de teatro de todo el país con obras de lo más variopinto, a saber, La vida es sueño, La Casa de Bernarda Alba, La Tortuga de Darwin, Aquí no paga nadie, Don Juan Tenorio o El cerco de Leningrado.
¿Qué ocurre en el estanque dorado?
La edad. El miedo. El amor. La soledad. La risa. Y la lucha por la vida dentro de una familia. Una isla de esperanza frente al peligro de extinción: de la naturaleza, de la familia, de la pareja, de la vida.
Una valiosa reflexión sobre lo difícil que es conseguir relaciones positivas. A cualquier edad. En cualquier momento. El goce es posible a pesar del implacable acoso del tiempo.
En el cine, una película de Oscar
Y en cuanto a su vertiente fílmica, de cuya adaptación se encargó el propio autor, ganó en 1981 los Premios de la Academia de Hollywood en las categorías de Mejor actor (Henry Fonda), Mejor Actriz (Katharine Hepburn) y Mejor guión adaptado.
Al tiempo fue candidata en las categorías de Mejor actriz de reparto (Jane Fonda), Mejor fotografía, Mejor director, Mejor montaje, Mejor banda sonora, Mejor película y Mejor sonido.
De la obra responde el oscarizado escritor, actor, director y dramaturgo estadounidense, Ernest Thompson, y de la dirección Euloxio Fernández.
Lugar:
Centro Socio Cultural Alfonso XII, C/ Mira el Río, 4, 28005, El Pardo.
Fecha y Hora:
Viernes, 24 de julio a las 19 horas.
Duración aproximada: 95 minutos.
Entrada general: Gratuita hasta completar aforo.
Destinada a todos los públicos.
¡No os podéis perder este obrón, palomiteros! ¡Os espero!
