Nelly y Erik, las dos mutaciones en las que se sustenta el poder de la variante británica del coronavirus

La aparición en la cepa británica de la mutación E484K, presente también en las cepas sudafricana y brasileña, preocupa especialmente

Tiempo de lectura: 2' Actualizado 20:06

La variante británica del coronavirus tiene en jaque al mundo desde hace semanas. Aunque apareció en septiembre, ha sido el inicio de 2021 lo que la ha convertido en motivo de pavor a nivel internacional. España, por supuesto, no es una excepción, con casos cada vez mayores en número relacionados con esta cepa, presente ya en 73 países.

La preocupación es aún mayor por los cambios que se dan dentro de la variante británica. Ahora mismo, se contabilizan hasta 23 cambios en ella, aunque hay dos mutaciones que se llevan la palma en cuanto a incidencia y riesgo.

Se trata de N501Y y E484K. En un primer momento, la segunda sólo se encontraba en las variantes sudafricana y brasileña. Sin embargo, ahora también está en la británica, junto a una mutación N501Y también presente en las cepas de Sudáfrica y Brasil. Van tan de la mano en estos momentos que ya se las conoce popularmente como Nelly y Erik.

Las dos afectan a la llave con la que la covid-19 entra en nuestras células. N501Y genera una mayor transmisibilidad y gravedad del coronavirus. Por si fuera poco, E484K redobla la apuesta: la respuesta con anticuerpos queda comprometida si esta mutación está presente.

Esto significaría que Erik haría más resistente al virus frente a la inmunización proporcionada por las vacunas. Lo cual volvería a la cepa británica todavía más peligrosa de lo que ya sabíamos. Algo que se puede comprobar con especial crudeza en la localidad brasileña de Manaos, donde Nelly y Erik están haciendo de las suyas a lo grande últimamente.

Los expertos quieren creer que la vacunación acabará con los problemas de ambas mutaciones. Aun así, a día de hoy hay diferencias significativas entre farmacéuticas: la vacuna de Pfizer es muy eficaz contra las cepas británica y sudafricana, pero la de Moderna (eficaz contra la variante de Reino Unido) es siete veces menos eficaz contra la segunda.

Lo que está claro es que la cepa británica del coronavirus es la más extendida a nivel foráneo. Y si esta ya incluye elementos de las otras dos más peliagudas, su envergadura puede ser aún más apabullante. Mientras avanza la inmunización frente a la covid-19, también deberá hacerlo la carrera por reducir los daños considerables que Nelly y Erik causarán mientras la protección no sea considerable.