Hostelería Madrid ha pedido una indemnización de 1.000 euros diarios a la Comunidad de Madrid para los establecimientos afectados por "el confinamiento selectivo". Según un comunicado emitido por la asociación, las medidas sanitarias aprobadas ayer por el Ejecutivo regional "reducirán significativamente" la actividad de 4.200 establecimientos ubicados en las zonas sanitarias que verán limitada su actividad al 80 por ciento, con la prohibición del servicio en terraza y el cierre a partir de las 22 horas. Por tanto, han considerado que estas restricciones deben ir acompañadas de una compensación económica para los perjudicados.

"Entendemos necesario que estas medidas deben llevar aparejadas ayudas directas a la hostelería que aseguran la supervivencia de los establecimientos afectados y que deben ascender a los 1.000 euros diarios durante la duración de las medidas", han apuntado.

Además, Hostelería Madrid ha añadido que no comprende como, "si los principales focos son la reuniones privadas", se sigue "limitando la actividad" en su sector, en el que "no se están produciendo significativamente contagios" de acuerdo con un estudio realizado por el Centro Nacional de Estudios Epidemiológicos.

Así, han considerado "necesarias" las medidas pero que deben "atacar a los verdaderos focos de contagio" y han recordado que el sector ya está soportando limitaciones de la actividad, como la reducción del aforo, la distancia interpersonal o la restricción a los fumadores, además del cierre del ocio nocturno.

"Queremos denunciar la escasa voluntad de la Comunidad de Madrid para sostener el sector de Pymes madrileño, ya que no ha aprobado apenas ayudas a los establecimientos", han señalado desde la asociación, y han apuntado que estas se limitan a dos líneas de subvenciones por empleados en ERTE que son "francamente insuficientes para un sector que representa el 5 por ciento del PIB regional".

De este modo, se han acogido a los datos ofrecidos por el Ministerio de Trabajo para denunciar que el sector hostelero ha perdido 40.042 empleos hasta el mes de agosto de los 195.000 existentes a comienzos de este año, lo que supone una descenso del 20 por ciento.

Finalmente, han exigido la aplicación de un Plan de Choque para la hostelería que proporcione una subvención a los establecimientos afectados y que "ayude a la supervivencia" a más de 12.000 Pymes que en otoño estarán "en peligro de quiebra".