
Madrid - Publicado el - Actualizado
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El PP y Ciudadanos han alcanzado un pacto para gobernar en la Comunidad de Madrid que recoge diversas peticiones de Vox. Hay un compromiso para una bajada generalizada del IRPF y bonificaciones fiscales para familias, jóvenes y emprendedores. Se incluye el cumplimiento de la regulación legal en materia de inmigración, si bien no se considera la expulsión de los Menores No Acompañados, algo que es contrario a la legislación internacional. Tras este pacto, lo que separa a PP y Ciudadanos de Vox es la legislación sobre la cuestión de género. Pero Isabel Díaz Ayuso se ha abierto a introducir modificaciones en el ámbito educativo, que es uno de los más importantes.
Vox debería ahora pronunciarse sobre este contenido programático y tomar una decisión a partir de las políticas que se han pactado. En Murcia impidió la investidura del candidato popular por la torpeza de Ciudadanos y por no sentirse suficientemente valorado. Un partido que pretende consolidarse en la vida pública nacional no puede actuar por el miedo a ser ninguneado. Vox llegó a la vida política anunciando que lucharía por determinados principios. En Murcia no hubo un rechazo basado en ideas.
Si Vox no quiere apoyar el Gobierno del PP y de Ciudadanos en la Comunidad de Madrid tendrá que explicar qué parte del pacto no le gusta o le parece insuficiente. Y qué políticas considera tan absolutamente innegociables como para justificar un gobierno de la izquierda.