El primer ministro de Tailandia, Prayuth Chan Ocha, ha anunciado este viernes que su Gabinete ha decidido suspender temporalmente la vacunación contra la COVID-19 de las dosis de AstraZeneca después de que algunos países de Europa detectaran una serie de efectos adversos tras su aplicación.

En una rueda de prensa, Prasit Watanapa, un alto cargo del Hospital Siriraj, ha confirmado que la suministración de estas dosis se retrasará siguiendo la misma medida tomada por países y regiones como Dinamarca, Noruega e Islandia, según informaciones del diario 'The Bangkok Post'.

El Gobierno danés ha decidido retrasar el uso de esta vacuna durante dos semanas después de que una mujer de 60 años sufriera un trombo y muriera, tal y como ha confirmado las autoridades del país.

Su respuesta se ha visto provocada, además, ante la "posibilidad de que se produzcan efectos secundarios graves", una alerta que ha sido levantada por varios países europeos. En el caso de Noruega e Islandia la suspensión se debe a una medida de precaución.

"A pesar de que la calidad de estas vacunas es buena, algunos países han solicitado un aplazamiento de su uso", ha confirmado Piyasakol Sakolsatayadorn, asesor del comité a cargo de la gestión del coronavirus en Tailandia.