Las autoridades de Sudán del Sur han anunciado el aplazamiento de forma indefinida de la reapertura de la frontera con Sudán, prevista para el 1 de octubre, según un acuerdo alcanzado en agosto, debido a la inestabilidad que atraviesa el país vecino.

La reapertura fue acordada en agosto por el presidente sursudanés, Salva Kiir, y el primer ministro de Sudán, Abdalá Hamdok, y supondría el fin de un cierre que dura cerca de diez años, desde la independencia de Sudán del Sur en 2011.

Mary Nyaka, ministra de Comercio y Minas en el estado de Bahr el Ghazal Norte, ha resaltado que el ministro de Comercio e Industria a nivel federal, Kuol Athian, le ha trasladado que las autoridades de ambos países "aún están trabajando en ello".

"Hay un problema en Jartum y los gobiernos no saben qué va a pasar en las fronteras", ha dicho, en declaraciones concedidas a la emisora Radio Tamazuj, en aparente referencia a la intentona golpista de septiembre en Sudán contra las autoridades de transición, integradas por civiles y militares tras el derrocamiento en 2019 del entonces presidente, Omar Hasán al Bashir.

Por su parte, Abraham Garang, presidente de la cámara de comercio en el condado de Aweil Oriental, ha destacado que los comerciantes se están viendo afectados negativamente por el cierre, al tiempo que ha confirmado que "la reapertura (de la frontera) no ha tenido lugar".

La frontera entre ambos países quedó cerrada en 2011 por el deterioro de las relaciones tras la independencia de Sudán del Sur y ante el cruce de acusaciones entre Jartum y Yuba sobre su apoyo a distintos grupos rebeldes.