El Comité Internacional de la Cruz Roja (CICR) ha llamado a la comunidad internacional a que emprenda una respuesta humanitaria urgente para auxiliar a la población de Sudán cuando está a punto de cumplirse el cuarto mes del estallido de un devastador conflicto entre Ejército y paramilitares que ha retroalimentado las tensiones permanentes entre las tribus de la región de Darfur, escenario ahora mismo de una campaña de atrocidades.

"La gente de la capital, Jartum, de Darfur y de otras zonas del país están viviendo en condiciones alarmantes, con mínimo acceso a atención sanitaria, agua o electricidad en medio de un dramático aumento de los precios de los alimentos en todo el país", ha hecho saber el comite.

El 15 de abril, y tras meses de discrepancias sobre la constitución de las futuras Fuerzas Armadas de Sudán, el Ejército sudanés y las poderosas fuerzas paramilitares de las Fuerzas de Apoyo Rápido (RSF) se lanzaron a una batalla sin cuartel que provocó un éxodo diplomático y humanitario y dejó el país a su suerte.

Las cifras de fallecidos son imposibles de verificar por la violencia reinante, en medio de bombardeos diarios en Jartum y alrededores, y matanzas tribales en Darfur. El CICR estima "miles de muertos, más de dos millones de desplazados internos y cientos de miles de refugiados en Egipto, Sudán del Sur" y Chad, completamente expuestos a la violencia. Un 80 por ciento del sistema sanitario del país se encuentra ahora mismo destruido.

En medio de esta situación, el CICR y la Sociedad de la Media Luna Roja de Sudán (SRCS) "continúan cruzando el frente, evacuando a los más vulnerables, ayudando en el traslado de los detenidos liberados y brindando apoyo a los hospitales en Jartum, Darfur y otras partes de Sudán y sus alrededores".

El CICR reivindica que, desde el estallido del conflicto, sus humanitarios han conseguido evacuar a 301 niños del orfanato capitalino de Maygoma, distribuido material para diez hospitales en Jartum, cuatro en Darfur y seis en otras regiones de Sudán, y desplegado un equipo de cirujanos en el este de Chad para auxiliar a los heridos que han conseguido cruzar la frontera.

El CICR también ha facilitado la liberación de 125 detenidos, entre ellos 44 militares heridos en calidad de intermediario neutral y a petición de las partes en conflicto.