Varios protagonistas de la Transición, entre ellos uno de los ponentes de la Constitución, José Pedro Pérez Llorca, han coincidido hoy en diagnosticar que la situación política actual no es la más adecuada para abordar una reforma de la Carta Magna por la falta de voluntad de consenso.

Pérez Llorca ha asistido en un lugar destacado en el centro del hemiciclo del Congreso al acto conmemorativo del 40 aniversario de la Constitución, al que también han acudido el exministro de la UCD Rodolfo Martín Villa o el exdirigente del PCE Ramón Tamames, entre otros líderes políticos de la Transición.

A su salida del acto, el ponente Pérez Llorca ha recordado que los "padres" de la Carta Magna vivieron hace cuarenta años el proceso de elaboración de la norma fundamental "con mucha intensidad, mucho trabajo, mucho esfuerzo y mucha dedicación", pero también con "cansancio y sueño" porque trabajaban de noche.

"Nos llevábamos muy bien y discutíamos muy pacíficamente", ha evocado antes de puntualizar que el momento de la sociedad española actual "es otro".

Ante la posible reforma de la Constitución ha advertido de que "hablar de reforma en abstracto es una pérdida de tiempo" y quien quiera modificarla debería de concretar cómo lo haría y en qué aspectos concretos.

Personalmente, él la cambiaría para "robustecer el Gobierno de España", porque a su entender "se ha quedado con facultades asimétricas".

También ha hablado de la Constitución el exministro Rodolfo Martín Villa, que era titular de Interior cuando hace 40 años se celebró el referéndum que avaló la Carta Magna.

No olvida que por su calidad de ministro del Interior, a él le correspondió anunciar los resultados de la consulta popular.

"No es una frase, es verdad que la Constitución fue un éxito de todos", ha apuntado, tras mostrarse convencido de que su aprobación contribuyó a que España esté ahora "mucho mejor" que hace 40 años.

Preocupado por la degradación que está experimentado la "reconciliación" que facilitó la Carta Magna, ahora no ve un "ambiente de entendimiento y acercamiento" que permita su reforma.

Ha considerado que "por supuesto" hay aspectos que deberían cambiarse, si bien ha hecho hincapié en que habría que acometer "seriamente" esta cuestión, y siempre salvaguardando los derechos y libertades, la separación de poderes y una España autonómica que, ha remarcado, "con todo lo que haya que cambiar, me parece que tiene que continuar".

Ha hablado también de la reforma constitucional Ramón Tamames, dirigente comunista durante la Transición quien piensa que sería bueno modificar la Carta Magna asuntos "obsoletos" como las referencias a Europa, el cambio climático o la sociedad internacional.

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Tamames ha advertido de que se trata de una tarea "difícil" por los problemas sobre soberanismo, populismo y "cortoplacismo" que afectan a España y que no favorecen el diálogo necesario para acometer una modificación de la Carta Magna.

El catedrático de Estructura Económica ha lamentado también que la Constitución no se estudie suficientemente y ha considerado que tendría que ser una de las asignaturas más importantes en el bachillerato y la enseñanza universitaria.