El ministro de Exteriores de Polonia, Marcin Przydacz, ha anunciado este viernes la expulsión de dos cónsules bielorrusos como represalia a un movimiento idéntico de Bielorrusia anunciado el día anterior.

Estas expulsiones son el hasta el momento último capítulo de las tensas relaciones entre ambos países que se han saldado con tres diplomáticos de cada país expulsados en una semana.

Las relaciones entre Polonia y Bielorrusia se han deteriorado debido al apoyo del primero a la oposición bielorrusa en su denuncia del fraude electoral y el gobierno de Alexander Lukashenko.

Asimismo, la agencia estatal polaca PAP ha informado de la presunta detención de la directora de la escuela polaca en Minsk, una detención que se une al fundador de la escuela polaca a los que se acusa de un presunto crimen penal por "heroizacion de los criminales de guerra".

EL DETONANTE

El detonante de esta crisis política fue un evento en honor a los 'Soldados Caídos', un grupo de resistencia polaco que se fundó para luchar en primer lugar contra los nazis, pero que desarrolló la mayor parte de su existencia como resistencia anticomunista.

Las acciones de los 'Soldados Caídos' son tildadas de "pronazis" por parte de Bielorrusia, que considera que honrar su memoria es un delito.

Sin embargo, desde Polonia se asegura que el acto por el que comenzaron las expulsiones diplomáticas se organizaba por un grupo de scouts y no era el primer año que se celebraba sin represalia alguna por parte del Gobierno bielorruso.