El ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, se ha dirigido este miércoles a los partidos de la derecha para decirles que "basta ya" de campañas de desprestigio y señalamiento hacia él y su equipo, que están sufriendo "las consecuencias de recuperar la dignidad del Ministerio del Interior".

Una semana más, Marlaska ha sido interpelado en la sesión de control al Gobierno por diputados del PP y Vox, que han pedido de nuevo su dimisión.

"Vuelven ustedes, todos ustedes, al insulto sobre quien soy, lo que represento y lo que hago", ha dicho el titular de Interior nada más subir a la tribuna para responder a una interpelación de la diputada de Vox Macarena Olona.

Marlaska ha insistido en que sufre las consecuencias de recuperar la "dignidad" del Ministerio del Interior, de "revertir los años de recortes, maltrato profesional y abandono de Policía, Guardia Civil, Dirección General de Tráfico, Instituciones Penitenciarias y Protección Civil con más plazas, mejores condiciones laborales y retributivas o mejores medios materiales".

"Son las consecuencias de decir basta ya al uso partidista del Ministerio del Interior, a la política de fabricación y filtración de informes a medida con fines políticos o a tener tolerancia cero cuando una filtración pone en riesgo los derechos fundamentales de cualquier procesado", ha continuado.

En respuesta a la interpelación de Vox, que le preguntaba sobre las medidas para "restituir la credibilidad" del ministerio, Marlaska ha replicado que "ninguna" porque todos sus organismos son instituciones "valoradas y queridas por la ciudadanía y no necesitan recuperar ninguna credibilidad .

"Lo que sí necesitaba este ministerio en sus estructuras directivas y en sus prioridades políticas era recuperar la decencia", ha enfatizado antes de afirmar que tanto él como su equipo llevan "sufriendo" campañas de señalamiento de PP y Vox por ser "valientes".

Y ha dejado claro que no se van a "doblegar" porque tienen una prioridad muy clara: "recuperar la dignidad" del ministerio y "modernizar" la seguridad.

Marlaska, que ha incluido también en su réplica "a lo que queda de Ciudadanos", no ha querido dedicar "ni cinco segundos" de su tiempo a responder "a expresiones como las que usan ustedes del tipo 'indigno', 'criminal', 'delincuente' o 'persona con profundos traumas'".

Pero ha asegurado que no tolerará que ataquen a lo que representa ni que calumnien lo que hace, y ha señalado que los tres partidos tienen "un problema muy serio" con la Constitución y con un Gobierno que "tiene la legitimidad constitucional" que le dieron la moción de censura primero y las urnas después.

Tras exigirles respeto, Marlaska ha opinado que la derecha no solo ataca al Gobierno sino que hace algo "peor": "calumniar la labor que se realiza por parte del Ministerio del Interior y sus 170.000 empleados públicos" .

Mientras, Macarena Olona ha querido ejercer la acusación contra un ministro sobre el que, según ella, pesan cargos de "una extrema gravedad", como haber utilizado la "violencia política" contra Vox.

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"Su sentencia está dictada; la ha dictado el pueblo español y es condenatoria. Ni vergüenza ni dignidad. Así rezará el tatuaje que la voluntad popular grabará a fuego sobre su memoria a perpetuidad", ha concluido.