En las últimas horas, los inversores han digerido bastante bien las cifras de inflación de Estados Unidos que se publicaron ayer. Ha alcanzado ya el 7 por ciento. Es su nivel más alto de los últimos 40 años. Ha sido un dato rematadamente malo, pero no peor de lo que se esperaba, por lo que los mercados hasta lo han dado por bueno. Algunos analistas esperaban un repunte de los precios en EEUU incluso hasta el 7,2 por ciento en tasa interanual.

Hoy en EEUU se conocerán los precios industriales y las peticiones semanales de subsidios por desempleo. La Reserva Federal espera que la inflación comience a relajarse en la segunda mitad del año. El presidente de este organismo, Jerome Powell, ha asegurado que la economía sigue fuerte a pesar de la variante ómicron y ya no necesita fuertes medidas extraordinarias de estímulo. También la Casa Blanca espera que la escalada de los precios se revierta a la vuelta de unos meses.

A esta corriente se ha sumado también la presidenta del Fondo Monetario Internacional, Kristalina Georgieva. Se ha mostrado convencida de que la inflación en Estados Unidos comenzará remitir ya en el segundo trimestre. También ha advertido sobre los vientos en contra que pueden afectar y ya afectan a la recuperación económica, como el excesivo crecimiento de la deuda pública. Además, ha asegurado que las criptomonedas ya tienen suficiente tamaño y capacidad para provocar un efecto dominó en los demás mercados. El Banco Internacional de Pagos comparte esta apreciación del FMI sobre la capacidad que tienen ya los criptoactivos para influir sobre los restantes mercados financieros.

Hoy el Banco Central Europeo presenta su boletín económico mensual. Dentro de casa, el gobernador del Banco de España, Pablo Hernández de Cos, revisará ligeramente al alza sus proyecciones para el crecimiento económico del año pasado y para este. Ahora el Banco maneja un crecimiento del PIB del 4,5 por ciento en el conjunto de 2021 y un 5,4 en 2022. Pero De Cos se ha curado en salud al recordar que estas proyecciones se pueden ver matizadas por la marcha de la pandemia.

Tras as primeras operaciones del día, el índice Ibex 35 baja un 0102 por ciento, hasta 8.760 puntos. Lastran al mercado las farmacéuticas y las empresas relacionadas con el turismo y los viajes. Por el contrario, suben ligeramente las acereras y los bancos. Repsol y Telefónica abren entre dos aguas.

En los demás mercados, destaca la fortaleza del euro. Se cambia ya claramente por encima de 1,14 dólares. Petróleo sigue caro, por encima de 84 dólares por barril. Ha recuperado ya los niveles que tenía hace tres meses cuando apareció la variante ómicron del coronavirus. En las “criptos”, el Bitcoin sube un 2 por ciento, hasta 43.750 dólares. El mercado de deuda continúa tenso, aunque algo menos que en los últimos días. Algunos expertos esperan ver este año la rentabilidad de los bonos de Estados Unidos a diez años en el 2,25 por ciento, frente al 1,74 por ciento de hoy.