La generación de la jubilación suave: "Antes era de un día para otro, hoy trabajabas, mañana no. Ahora muchos van reduciendo su tiempo de trabajo"
La experta Ana Samboal analiza en 'La Linterna' de COPE las nuevas tendencias laborales que están redefiniendo el final de la vida profesional para siempre
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El programa 'La Linterna' de COPE, conducido por Expósito, ha analizado junto a la experta Ana Samboal las últimas tendencias en el mundo laboral. Entre ellas, destaca un concepto que está ganando fuerza de cara a 2026: la jubilación suave. Esta nueva modalidad promete cambiar la forma en que las personas afrontan la transición del trabajo al retiro.
Qué es la jubilación suave
Ana Samboal ha explicado que la jubilación suave no debe confundirse con el simple alargamiento de la vida laboral, una medida que busca descargar la factura de la Seguridad Social. Según la experta, esa visión gubernamental permite seguir en activo a tiempo completo o parcial una vez alcanzada la edad legal, sobre la que puedes encontrar más detalles de cómo subirá a partir de 2026, pero el concepto es otro. La verdadera jubilación suave, según Forbes y los expertos en gestión de personas, es un proceso que comienza antes.
Se trata de una transición paulatina donde los trabajadores, años antes de su retiro oficial, empiezan a reducir su jornada laboral. "Antes la jubilación era de un día para otro, hoy hacías tu jornada laboral completa, y al día siguiente ya no tenías nada que hacer", ha recordado Samboal. Ahora, la tendencia es que muchos reduzcan paulatinamente su tiempo de trabajo para llegar a la jubilación de una forma más progresiva, evitando lo que para algunos suponía una "depresión asegurada".
Antes era de un día para otro, hoy trabajabas, mañana no"
Periodista
Este modelo emergente permite a las personas dedicar más espacio al ocio o emprender nuevos caminos como autónomos o en el tercer sector. Es, en palabras de la colaboradora de COPE, "otra forma de trabajar, posiblemente ganando menos dinero o nada, pero también con menos estrés, seguro que con un nivel de exigencia más bajo". Un enfoque que contrasta con las dificultades que a veces surgen en la etapa final de la vida laboral, como cuando la Seguridad Social deniega una pensión completa pese a una larga cotización.
Una jubilada en un cajero automático
El futuro del trabajo: ecosistemas y habilidades
Otra de las tendencias analizadas es la concepción de la oficina como un "ecosistema conectado". Gracias a la tecnología, los espacios de trabajo se han vuelto "líquidos", permitiendo a los equipos colaborar desde casa o, como ha señalado Expósito, "desde cualquier lugar del mundo". Este nuevo paradigma, si bien ofrece flexibilidad, presenta el reto de mantener las culturas empresariales a distancia.
En este contexto, la formación permanente se convierte en una "necesidad acuciante". Con el auge de la inteligencia artificial, la convivencia entre la inteligencia humana y la artificial será una realidad en 2026. Profesionales de áreas como la selección de personal o la gestión de tesorería deben estar "al día", ya que el reciclaje profesional y la mejora de habilidades son de primer orden.
Ante la pregunta de qué rol queda para las personas, Samboal ha afirmado que las habilidades netamente humanas son cada vez más valoradas. "El cálculo lo hacen las máquinas y hay que saber manejarlas", ha apuntado, pero en los nuevos "ecosistemas líquidos" se necesita gente con capacidad de organizar, trabajar en equipo y dotes de comunicación. A la hora de contratar, hay un "énfasis creciente" en las llamadas habilidades blandas, como la resolución de problemas humanos y el pensamiento estratégico.
Samboal ha recordado la icónica frase de la película Jerry Maguire, “Ayúdame a ayudarte”, como un ejemplo de esa interacción humana que una máquina, de momento, no puede replicar. Este factor humano es clave, sobre todo en un mercado donde muchos empresarios lamentan la falta de talento.
Un jubilado lee el periódico en Madrid
Retención de talento y la búsqueda de la felicidad
La falta de talento no parece ser un problema exclusivo de España. Un estudio de la consultora Mercer revela que para el 78% de los trabajadores, la mejora de la experiencia del empleado es una "prioridad crítica". Samboal ha destacado que "si es difícil encontrar talento, es más complicado retenerlo". La clave reside en gestionar a cada persona de forma individualizada para que se sienta conectada y pueda desarrollar sus capacidades, un desafío frente a las penalizaciones por jubilación anticipada que algunos trabajadores deben afrontar.
Finalmente, ha emergido una tendencia sorprendente: los departamentos de felicidad. Ana Samboal ha señalado que las multinacionales están empezando a crear estas áreas para "procurar que los empleados sean felices trabajando". Como caso curioso, ha mencionado una empresa india donde el jefe de felicidad es un perro cuya función es animar a los empleados, mediar en discusiones y romper la rutina en las reuniones.
Este contenido ha sido creado por el equipo editorial con la asistencia de herramientas de IA.