Los versos y las reflexiones ya cobran vida en cada rincón de Brieva (Segovia), un municipio de poco menos de cien habitantes que desde hoy acoge a más de una veintena de poetas de renombre y 300 aficionados con el fin de convertirse en capital poética y morada de poetas.

Escandar Algeet, María Nieto y Hasier Larretxea serán algunos de los participantes en esta primera edición del festival 'Pan Duro', que incluye como pregonero al premio Nacional de Poesía y Premio Castilla y León de Las Letras 2018, Juan Carlos Mestre.

Esta iniciativa pionera impulsada por el Consistorio de Brieva y sus vecinos pretende aunar valores típicos de este pequeño municipio segoviano como el gusto por los recitales, los montajes teatrales y la narración, han precisado fuentes de la organización.

También por su historia, ya que hasta hace no mucho tiempo era una localidad gobernada mediante Concejo Abierto y la palabra de los vecinos tenía un peso decisivo.

Según ha explicado en declaraciones a Efe el responsable del Congreso Internacional de Alcaldes & Innovación, Chema San Segundo, quien se encarga de impulsar este tipo de iniciativas, se trata de un acontecimiento cultural más propio que de una ciudad que de un pequeño municipio como Brieva.

Sin embargo eso es lo que lo hace "absolutamente especial", ha detallado, ya que todo el pueblo está implicado y el objetivo es lograr un ambiente "muy familiar" en torno al arte de la poesía.

La frescura y la innovación de los poetas más jóvenes se mezclan con la experiencia y los recursos de los veteranos en un encuentro que demuestra que "en cualquier lugar del mundo pueden ocurrir cosas espectaculares", ha subrayado.

Supone un micrófono abierto en el que cualquiera puede dar a conocer sus creaciones y reflexiones, pasacalles, microrrecitales, tertulias literarias, performances y sesiones musicales forman parte de este encuentro.

Una de las experiencias más mágicas será, según San Segundo, la apertura del año nuevo poético con las doce campanadas a cargo de la artista, poetisa y Premio Nacional de Fotografía Ouka Leele, un acto en el que simbólicamente se liberará a doce poetas encadenados.

Otra de las figuras será Mestre, que pretende transmitir el valor y el poder de la poesía para "detener el tiempo del olvido y de la cruel amnesia de la historia y hacer de ello el primer imperativo de una sociedad democrática", tal y como ha explicado en declaraciones a Efe.

Ha insistido en que los versos son una herramienta para "reconstruir sueños" y "devolver a la sociedad la esperanza de un futuro más justo", por lo que esta experiencia supondrá reabrir la discusión del mundo desde visiones "completamente dispares" e "irrepetibles".

Personas vinculadas a la conciencia y a la necesidad de saber en qué mundo viven interrumpirán por unos días la costumbre para analizar los entresijos de una sociedad que, según Mestre, "está basada en el culto al dinero y afectada por una grave esclerosis que abandera la vergonzosa publicidad".

En la misma línea, considera que los poetas no son legisladores del mundo, tampoco profetas, ni tienen autoridad, pero la poesía es, a su juicio, "una bandera sin patria que recuerda que no hay mas alta tarea que la lucha por el derecho civil a la felicidad".

Las sociedades amantes del arte, la música, la literatura o la filosofía son "cultas" e "inmensamente más tolerantes", por lo que, tal y como ha puesto de manifiesto, "contribuyen al irrenunciable proyecto de la dignidad de las personas".

Por último, ha desvelado que a penas unos meses después de este encuentro, en otoño, publicará su siguiente trabajo, un libro escrito en gallego en el que reflexionará sobre su origen, sus antepasados y la condición de frontera que ejercen los lenguajes y las personas que no han tenido otra conciencia del mundo que la que pudieron obtener a través de las palabras.