España cuenta con unos 400 mil bares, según el INE hay un bar por cada 175 habitantes. Un lugar clave donde la gente se encuentra y se relaciona entre ella, pero ¿son los bares claves en la dinamización de la gente?

Este martes en 'La Tarde', Pilar Cisneros ha podido hablar con Sergio Gil, antropólogo y creador de la “gastropología”. Esta es una metodología de análisis de bares y restaurantes desde una perspectiva antropológica.

Asimismo, el antropólogo ha explicado que un bar tiene un “papel sociabilizador”, y aunque los seres humanos socializan en todas partes, en los bares y restaurantes se hace “de otra manera, con mayor potencia y de una manera muy horizontal, tremendamente democrática”.

Cuando cierra el último bar de un pueblo “se pierde la socialización de la gente que vive ahí y también la ventana abierta a la gente que les quiere visitar”.

Además, asegura que existen similitudes entre un bar de barrio y el bar de un pueblo, pues “dan cobijo a una comunidad y establece menos fronteras entre barrio y otros barrios o entre pueblo y otros pueblos”.

Bares y despoblación rural

Por otro lado, el programa ha contado con la presencia de José Ramón, el dueño de un bar en Castell de Cabres (Castellón), que tras echar el cierre ha visto como el pueblo ha ido muriendo.

Tras 30 años abierto, José Ramón asegura que el bar cambió “la vida del pueblo al dar una puerta abierta, recoger muchos recados, reuniones formales o informales y dar un servicio de cobertura de intercambio de gente”.

Sin embargo, según el ex dueño del bar, el pueblo está “desangelado” tras el cierre, y añade que aún hay gente que pregunta “si hay bar, si el bar está abierto o si lo regenta el mismo que lo regentaba”.

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Y es que ahora, en Castell de Cabres, la gente se reúne igual, pero “no es lo mismo”, señala José Ramón. La decisión de dejar el bar le costó mucho, pero no tenía relevo generacional y después de tantos años tras la barra quería jubilarse.