El juez Pedraz, tomaba el pasado viernes la decisión de ordenar el cierre de Telegram, después de que Antena 3, Mediaset y Movistar denunciaran que la red social estaba compartiendo contenido con derechos de autor. Las compañías de telefonía han estado todo el fin de semana preparando el bloqueo esperando que llegara la orden, pero este lunes el juez de la Audiencia Nacional lo ha retirado por excesivo y poco proporcional.

Martín Piqueras, profesor de OBS Business School y Experto en estrategia digital en Gartner respondía en La Linterna a si la decisión del juez Pedraz estaba justificada: “Esta un poco sobredimensionada, es como si decidiésemos cerrar todas las carreteras de España porque hubiera personas trasladando productos ilícitos”. Para el experto, las empresas que dan servicios de mensajería o tenga una app de uso masivo, suelen colaborar con policías o jueces cuando hay un uso ilícito, “y Telegram no lo está haciendo”. “La decisión inicial es cerrarle la aplicación por no colaborar, pero es sobredimensionada porque es cortar todo el uso de la aplicación, desde ilegítimo pero también el legítimo”.

El principal delito que se comete en Telegram

Así, Piqueras pone en COPE un ejemplo con el que comparar Telegram con un caso de hace sólo unos años: “Hace un tiempo las personas que se querían comunicar de manera discreta usaban las Blackberry, ahora estamos en lo mismo”, apunta. Y es que, explica, ambos son un medio de comunicación discreto, poco espiable, que se usa también para usos legítimos como “empresas que hacen compras y ventas de productos de forma segura a través de la plataforma.

Pero, ¿hay que legislar? Para Piqueras la respuesta está clara: “sí”. “Lo que hay que hacer es buscar mecanismos que permitan, por un lado, la libertad de expresión, pero que cuando alguien haga algo que esté penado en el Código Penal (como los hackers que cobran a través de Telegram, o los pederastas), debería haber mecanismos que permitan moderarlos de manera eficiente y eficaz”, subraya.

¿Ha aumentado el consumo de Telegram?

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Así, y teniendo en cuenta las propuestas de legislación respecto a los servicios de mensajería, Martín Piqueras critica que lo que el juez estaba dictando “puede ser eficaz, pero nada eficiente, es matar moscas a cañonazos”. Además, recuerda que Telegram tiene 900 millones de usuarios en todo el mundo, 8 en España. Incluso se aventura a predecir que “muchísimas personas se han suscrito después de la polémica”.

“No es que sea la dark web, pero sí que se usa en el mundillo de informáticos y personas que buscaban entornos paralelos más seguros, pero ahora ha llegado a niveles muy interesantes”, concluye.

“Prohibir Telegram no iba a servir de mucho”

Por su parte, Borja Adsuara Varela, que es experto en Derecho, Estrategia y Comunicación Digital, destacaba también este lunes en Herrera en COPE que la decisión del juez Pedraz “no iba a servir para mucho, porque los delincuentes lo iban a seguir haciendo".

A través de una VPN, por ejemplo, dichas personas pueden trampearlo. Recuerda, además, que "hay que dejar claro que el juez no acusa a Telegram. A Telegram lo único que le ha pedido es que identifique a las personas físicas que están cometiendo delitos en uno de sus canales". También incidía en que el problema no es saber lo que están haciendo estos grupos, sino "identificar a los administradores que los han abierto". "Es un pulso entre el Estado de derecho y los señores feudales digitales, que dicen que están por encima de las leyes nacionales", concluía al respecto en los micrófonos de Herrera en COPE.