"Señoras, señores, me alegro, buenos días...

Dentro de poco el 'Txupinazo', es decir, comienzan los Sanfermines, quizás la fiesta más internacional de España, la que es considerada la fiesta prólogo de las fiestas de Estella como saben ustedes, que este año además adopta por primera vez una preocupación socila que, sorprendentemente, durante algunos años ha estado fuera de la agenda de medios de comunicación, de autoridades policiales, de autoridades municipales, incluso de la ciudadanía: el grave problema que en San Fermín se plantea con la seguridad de muchas mujeres que son agredidas sexualmente, cuando no violadas.

Es decir, el caso del año anterior no es un hecho aislado, en el que cinco animales violaron -presuntamente, claro, ahora se verá el juicio oral- a una mujer, en muchos lugares de la ciudad. Especialmente en aquellas campas donde la gente se echa a dormir casi casi con el coma etílico. Hay mujeres que no se despiertan del coma etílico mientras otros están abusando de ellas. Y eso eso es una realidad que ha ocurrido, y a otras a las que se le somete a auténticas vejaciones. No es un pasaje que ocurra cada minuto y en todos los rincones de la ciudad, ni mucho menos, pero ocurre.

Y en esta ocasión, los agentes de la Policía Nacional y la Policía Foral se trabajan para esta semana. No ya solo robos y peleas, violaciones y abusos sexuales. Es de decir, se va a trabajar muchas horas y en muchos lugares, incluso con policías de paisanos, se va a incrementar ese personal, se va a intensificar el patrullaje, para evitar las agresiones a mujeres en sanfermines, que es una fiesta que, por otra parte, no se merece eso. Vivamos unos sanfermines en paz y en tranquilidad que es lo que nos corresponde. 

Hoy, fíjense que hay noticias en España de envergadura, sin embargo, en las portadas de todos los periódicos, en los digitales, en los informativos televisivos y en los radiofónicos, el llamado desde Venezuela es inevitable. Porque Venezuela está al borde de una guerra civil. Ayer se vivió en la Asamblea, en el Parlamento, en la sede de la soberanía nacional, donde están los señores y señoras que ha elegido el pueblo venezolano, en este caso aquí en España también sabemos lo que eso significa, y donde ayer entraron una serie de matones impulsados por el madurismo, madurismo-chavismo, con tubos, con palos, con bates, con cohetes, con la connivencia y con la tranquilidad de la Guardia Nacional, para asaltar y para, durante siete horas, apalear a parlamentarios. Apalear a parlamentarios.

Estaban los parlamentarios decidiendo sobre un plebiscito acerca de la Asamble Constituyente que quiere montar Maduro. Una asamblea nombrada por él que elimine a este en donde él no tiene mayoría, la tiene la oposición democrática. Entraron y este es el resultado, la visualización de la degeneración de un régimen de un dictatorial, de un régimen que le gusta mucho, por cierto a algunos partidos políticos en España, coaligados entre sí. La degeneración dictadora de un perfecto analfabeto como Nicolás Maduro, heredero de un régimen que, como dice Felipe González, consigue las cosas por los votos o por las botas. Es un ataque sistemático, con la connivencia de la Guardia Nacional. Entraron cerca de cien personas, con hachas, con palos, con tubos de metal... Y oiga, qué milago, ni un detenido. Ni un solo detenido. 

El Tribunal Constituciona ayer dio un paso fundamental para paralizar de antemano el referéndum ilegal en Cataluña. Ha anulado por unanimidad la partida del presupuesto destinada a financiar ese referéndum. Es decir, aquel que gaste el dinero en ella sabe que está cometiendo una ilegalidad, ya no puede alegar desconocimiento. Así que cada palo aguante su vela. Es evidente que las autoridades catalanas, estas autoridades, están deseando que se prohiba por decreto, que el Gobierno central haga algún aspaviento vociferante, porque luego eso alimenta su puesta en escena. Y eso me da a mi que no va a ocurrir.

Esta mañana venimos hablando del pulso de cirujano que ha de tener el Gobierno, la sangre fría que ha de mostrar el Gobierno en estas cosas, en todo este truño inmenso que quieren colocar los independentistas catalanes, dividiendo, fracturando, irritando a la sociedad catalana, van a dejarla como un mosaico deshecho, para impedir que llegue a su fin. Así que ojo porque este fallo es muy importante.  

Supongo que de él se hablará hoy en esa reunión que van a mantener Pedro Sánchez y Mariano Rajoy en la Moncloa. Esta reunión en la que, según cuentan, la estrategia de Sánchez es, hombre, no llamarle indecente a Rajoy, pero yo no sé si hacerse mucho el simpático. Pero ya verán ustedes, como fruto de esa insufrible superficialidad que muestra el candidato, se va a proponer que se solucionen con el mantra inevitable: el diálogo. Ah, caramba, cómo no se nos había ocurrido antes, cómo no se le había ocurrido antes al Gobierno que esto se puede solucionar mediante un diálogo. Pero mediante un diálogo que exprese qué, que ceda en qué y que aclare qué. Porque eso es lo que no explica, ya veremos si lo explica hoy... ¿Una reforma constitucional de qué? ¿De cómo? ¿Hasta qué extremo?

Ayer en el acto del 15 aniversario de Vocento, el grupo en el que está ABC, se apuntaba un tanto magnífico, que era juntar a tres expresidente de Gobierno, a Aznar, a González y a Zapatero. Por cierto, que demostraron entre ellos un sintonía mayor de la que mostraron durante el tiempo en el que coincidieron entre gobiernos y oposición unos y otros.

Los tres coincidían en la necesidad de una salida política al desafío catalán. Pero una salida política al desafío catalán es decir que esto no se arregla simplemente mandando a los guardias, que si hay que mandarlo, pues que el último paso sea enviar a los guardias. Que, por cierto, son los Mossos D'Esquadra. En este acto defendieron Aznar y González la vía del 155 como respuesta si se vulnera la Constitución. Hace poco lo dijo también Alfonso Guerra. Dice González que el 155 es lo suficientemente ambiguo, afortunadamente, para permitir modulaciones en su aplicación. Es decir, no se trata de llegar allí un ejército de tíos, levantar al funcionario del asiento y ponerse él a manejar el ordenador. No hace falta eso. Fue interesante la reunión, es un indudable éxito, y yo les aconsejo que hoy acudan a las páginas de ABC, a la lecturas y a los detalles de todo ello. Porque hicieron un balance bastante positivo de España después de cuarenta años de democracia. Aznar pidió que no se cuestionen los fundamentos de los últimos cuarenta años. Y González advirtió de que los que olvidan el pasado no pueden ver el futuro que podemos ser. Así que cuidadito y pies de plomo".