El Pleno del Ayuntamiento de Madrid ha expresado su apoyo unánime a los tres bomberos sevillanos de la organización Proem-Aid acusados de inmigración irregular en Grecia por su labor humanitaria, que se han reafirmado hoy en su acción ya que por su profesión -han dicho- están "condenados a salvar vidas".

Los cuatro grupos municipales -PP, Ahora Madrid, PSOE y Cs- han respaldado hoy los puntos de la propuesta del concejal Mauricio Valiente (Ahora Madrid) que reconocían el trabajo de los bomberos Manuel Blanco, Julio Latorre y José Enrique Rodríguez, detenidos en 2016 por las autoridades griegas mientras hacían tareas de salvamento marítimo cerca de la isla griega de Lesbos.

Después de pasar tres días en el calabozo, fueron puestos en libertad bajo fianza y está previsto que sean juzgados el próximo 7 de mayo en Grecia por un delito de tráfico de personas en grado de tentativa.

"Es un llamado de atención acerca de la implicación que tenemos que tener todos en la crisis de los refugiados y en la inmensa fosa de desaparecidos en que se está convirtiendo el Mediterráneo", ha dicho Valiente a los medios de comunicación a las puertas del Pleno, donde ha comparecido con Manuel Blanco.

"Estamos contentos y orgullosos de lo que hemos hecho, que es salvar vidas", ha explicado el bombero de la Diputación de Sevilla y vicepresidente de la asociación Proem-Aid a los periodistas, que ha opinado que "se está juzgando a la solidaridad y se está penalizando al que ayuda".

La proposición reitera el apoyo del Ayuntamiento a las personas que prestan ayuda, rescate y asistencia a las personas inmigrantes, y reconoce el papel de los voluntarios que realizan labores de rescate en el mar y la utilidad y el carácter humanitario de las ONG Proem Aid y Open Arms.

A excepción del PP, que ha votado en contra de los dos últimos puntos de la proposición, el resto de grupos municipales ha apoyado reclamar al Estado español y a la Unión Europea el cumplimiento de los compromisos de acogida para los solicitantes de asilo y que se cumpla el requisito de no devolución acordado en la convención de Ginebra en 1951.

Estos tres partidos han apoyado dar traslado al Ministerio de Exteriores el deseo de impulsar un "giro profundo" en las políticas migratorias.