Quedamos con Fernando García Rodríguez a la entrada de la localidad salmantina de El Cabaco, término donde se crían las reses del hierro de Adelaida Rodríguez. En la finca, “Zarzosillo de Abajo” todo está pensado para el toro, auténtico rey de estos pagos bajo la atenta mirada de la Peña de Francia al fondo. Repasamos junto al ganadero tanto la camada, de una seriedad apabullante, como varios lotes de vacas junto a sus crías. Fernando es ganadero las 24 horas del día, se nota. Conoce todos los detalles de sus animales y se enorgullece de ello. Para él, esta es su vida diaria, no un divertimento de fin de semana. Y eso, a la larga tiene su recompensa. Fernando García lo reconoce y destaca que en los últimos años, si por algo sobresale su vacada es por “la regularidad. En estas últimas temporadas nos están embistiendo los toros con bastante regularidad y es lo que queremos seguir demostrando este año. Al final, el trabajo y la constancia tienen sus frutos”. Consciente de cómo está el mercado de bravo, el ganadero salmantino reconoce que seguirán la línea marcada en los últimos años: “Tenemos preparada una camada de cinco corridas y dos novilladas. Hay que mantenerse, no está el tiempo para aumentar. Y por ahora, también estamos manteniendo el número de vacas, ahora mismo tenemos unas 200. Es el número que creo justo para atender la demanda de nuestros productos”. Sobre los destinos, están ya confirmados Bilbao en España y Vic y  Alès en ruedos galos. En la capital de El Botxo, Adelaida será una de las novedades en sus Corridas Generales. Algo que ya comienza a preocupar a Fernando, ya que “Bilbao es la tarde clave del año. Allí se eligen a ocho ganaderías de las más importantes de España e ir allí es un privilegio, un reto y una responsabilidad, hay que demostrar el por qué te eligen para estar en Bilbao”. Pero el bastión del hierro charro ha sido y es Francia. Algo que no disimula el ganadero y por ello no le duelen prendas en reconocer que “Francia es el prototipo de afición. Les gusta el torero bueno y la ganadería brava y encastada. Son fieles a ti si respondes a sus expectativas. Están cuidando muy bien la Fiesta y en momentos de crisis son un ejemplo. Y en nuestro caso, es un orgullo que año a año se acuerden de Adelaida Rodríguez y nosotros podamos colmar las esperanzas que ponen en nuestros toros”. La ganadería de Adelaida Rodríguez es una de las ya escasas que siguen apostando por el encaste creado por Lisardo Sánchez a mediados del siglo XX. Algo que define el hijo de Adelaida Rodríguez de “romanticismo, pero un romanticismo que cada vez se hace muy duro porque se está convirtiendo en algo minoritario este encaste. Cuesta que los toreros se pongan delante de estos toros y que las empresas compren nuestras corridas. Menos mal que es un encaste que vale para plazas de primera y por eso podemos ir defendiéndonos. Al paso que va esto, nos quedaremos como un encaste minoritario como otros muchos”. Algo que lleva con orgullo Fernando García es el predicamento que tienen sus toros entre los aficionados, tanto españoles como franceses: Y reflexiona: “Que el aficionado apueste por nosotros es muy importante, porque al final el aficionado es el que mantiene la Fiesta, el que paga las entradas. Es un orgullo. Que hablen bien de esta ganadería es sinónimo de que estamos haciendo bien las cosas. Cuando recojo premios, los que más alegría me dan, son los que me entregan peñas de aficionados, lo reconozco…”. Pese a no estar en Salamanca después de su triunfo en 2012 con un toro de vuelta al ruedo que propició el triunfo de Iván Fandiño, - “hay muchos ganaderos y pocas corridas y este año no le ha tocado a Adelaida. Será el año que viene…”- Fernando pide a este 2013 “que la ganadería de Adelaida Rodríguez esté en boca de los aficionados por el juego encastado y bravo que vayan dando nuestros toros durante todo el año”.