Rastrean un movimiento telefónico desde el móvil de Diana Quer a las 3.30 de la mañana

Cumplida una semana sin noticias de la joven madrileña Diana Quer, desaparecida en la madrugada del lunes 22 en A Pobra do Caramiñal, todo apunta a que su marcha no ha sido voluntaria. El que Diana saliese sin identificación ni dinero ampara esta hipótesis, la misma que los padres -que este lunes negaron que la muchacha hubiese vuelto a casa a cambiarse de pantalón- defienden desde el primer día. El inesperado hallazgo del DNI en la vivienda de veraneo de la familia activó este lunes de nuevo los rastreos por tierra y mar que en los últimos días habían decaído. Se peinan zonas boscosas y, sobre todo, pistas forestales a las que se puede acceder en coche. Por el momento, estas batidas corren a cargo de miembros de Protección Civil y de la Guardia Civil, el plantel más numeroso hasta el momento, aunque en los próximos días podría pedirse colaboración vecinal.

La madre de la joven también confirmó este lunes a ABC la aparición de una nueva línea de investigación desconocida hasta el momento. Según la progenitora, los agentes detectaron una comunicación telefónica con el móvil de su hija a las 3.30 de la madrugada. El dato es significativo porque el último contacto conocido con Diana se produjo a las 2.40 de la mañana (el whatsapp a un amigo) y, de confirmarse este nuevo movimiento, el margen horario de su desaparición variaría. Este hecho se vincula con que Diana hubiera podido regresar al pueblo tras despedirse de sus amigas y con el testimonio de una persona que la vio haciendo el camino de vuelta hacia una gasolinera. A falta de conocer los pormenores de esta pista, la madre de la joven adelantó que la interlocutora podría ser una amiga de Madrid que estaban tratando de localizar este lunes.

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