Santoral

San Nicolás de Bari

Santo muy popular y del que se han escritos muchas anécdotas que desfiguran su vida real

Los caminos de Dios no son los nuestros, sus planes no tiene que ver con los de los hombres aunque a veces se parezcan. Lo mismo sucede con los Santos y la realidad que tienen desde su vida a diferencia de la idealización que los hombres hacemos de ellos. Hoy, II Domingo del Tiempo de Adviento celebramos a San Nicolás de Bari. Santo muy popular y del que se han escritos muchas anécdotas que desfiguran su vida real.

Oriundo de Licia, en Turquía, sus padres se encargaron de que tuviese una formación sólidamente cristiana. A esta educación se sumó el Obispo de Pitara. A la muerte de sus padres, le queda una importante fortuna. Pero siente cómo Dios le inspira vender esas posesiones terrenales, si quiere ser perfecto y perseverar en la Fe, siguiendo el consejo evangélico de vivir en la austeridad durante la estancia terrenal para sí adquirir un tesoro en el Cielo.

El santoral de hoy, domingo 6 de diciembre

Casualmente entonces oyó la noticia de un padre que iba a vender a sus hijas, dada la pobreza en que se hallaba sumergido. Fue cuando le entregó monedas de oro de las que disponía, evitando que pusiese en marcha aquel plan nocivo. Así el Señor le marca la forma de utilizar el dinero en bien de los demás. La propia Providencia quiere que desemboque en Mira, cuando el anciano Obispo de esa Diócesis había fallecido. Inesperadamente, reparan en él para que sea el Pastor de allí, servicio que hubiese rechazado, de no ser por la obediencia que tenía.

Tuvo que sortear muchas dificultades, entre las que se encuentra defender a muchos inocentes condenados a muerte, o asegurar el respeto al Edicto de Milán, obra del Emperador Constantino, y por el que se prohibía la persecución a los cristianos. San Nicolás de Bari muere en el siglo IV y sus reliquias son trasladadas a Bari (Italia), el siglo XI.

dd/mm