El Papa León XIV lamenta el "moralismo" y la "privatización de la fe" en un mensaje dirigido a las familias
El pontífice también se ha referido a la búsqueda de espiritualidad con la que cada vez se identifican más jóvenes, que quieren tener relaciones más significativas y auténticas
León XIV
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"Cuántas veces, en un pasado quizá no tan lejano, hemos presentado la vida cristiana principalmente como un conjunto de preceptos que hay que observar, sustituyendo la maravillosa experiencia del encuentro con Jesús, Dios que se nos dona, por una religión moralista, pesada, poco atractiva y, en cierto modo, irrealizable en la concreción de la vida cotidiana." Así se dirigía a las familias el Papa León XIV, en el Seminario organizado por el Dicasterio para los Laicos, la Familia y la Vida.
El Papa llama a reencontrarse con ese amor que Jesús siente por la humanidad, una labor que se dificulta en los tiempos actuales por los estímulos a los que nos vemos sometidos en los que la fe "no tiene lugar". León XIV se ha referido a las redes sociales como uno de estos medios "dañinos cuando se convierten en vehículo de mensajes engañosos", a pesar de su alto y "buen potencial" como herramienta.
La gracia del matrimonio cristiano
Por eso, el Papa critica la privatización de la fe. De esa manera, se impide conocer "la riqueza y los dones de la Iglesia, ¡lugar de gracia, de fraternidad y de amor!". También ha hablado del don del matrimonio y la importancia de inculcar esa gracia entre los más jóvenes: "Quizás muchos jóvenes, que en nuestros días eligen la convivencia en lugar del matrimonio cristiano, necesitan realmente que alguien les muestre de modo concreto y comprensible, sobre todo con el ejemplo de la vida, qué es el don de la gracia sacramental y qué fuerza se deriva de él."
Así, el Papa le ha pedido a las familias que hagan de "pescadores" de esas personas, que son arrastradas por "las aguas del mal y de la muerte mediante el encuentro con Cristo". El Papa ha querido aconsejar a las familias que no se dejen llevar por los momentos difíciles: "No se dejen desanimar por las situaciones difíciles que se les presentan. Es cierto, hoy los núcleos familiares están heridos de tantas maneras, pero el Evangelio de la familia alimenta también aquellas semillas que aún esperan madurar”.