Absueltos los dos sacerdotes que fueron acusados por proferir comentarios ofensivos contra el Islam

La Sección Primera de la Audiencia Provincial de Málaga ha absuelto a Custodio Ballester y a Jesús Calvo, los dos sacerdotes que estaban acusados de un delito de odio contra el Islam por sus comentarios en un medio digital

EFE

Custodio Ballester saliendo del juzgado

Redacción Religión Agencia EFE

Publicado el

2 min lectura

El juicio quedó visto para sentencia el pasado 1 de octubre y el fiscal durante sus conclusiones aseguró que los sacerdotes con sus publicaciones atacaban al islam y la comunidad musulmana, por lo que pidió que fueran condenados cada uno de ellos a tres años de prisión y multa de diez meses con una cuota diaria de diez euros. El ministerio público también pedía cárcel para el director del medio digital, en su caso cuatro años de prisión, pero la Audiencia también lo absuelve.

 El Tribunal no cuestiona los hechos objeto de enjuiciamiento en lo esencial porque los propios magistrados destacan que los acusados no niegan realmente la autoría de los artículos. La cuestión debatida queda circunscrita para la Sala en si tales hechos tienen encaje jurídico en un delito de incitación al odio y hace un análisis de forma individualizada de cada uno de los tres acusados. 

Respecto al sacerdote Custodio Ballester, el Tribunal indica que aunque las afirmaciones pueden considerarse desafortunadas, "no por ello pueden estimarse constitutivas de delito de incitación al odio". Los magistrados matizan que los comentarios que Custodio Ballester pronunció en aquel medio digital no pueden ser consideradas un delito de incitación al odio, porque "no apreciamos que se haya superado tal límite." 

En cuanto a las declaraciones del otro sacerdote, Jesús Calvo, los magistrados han tenido en cuenta el diagnóstico médico que aportó su defensa y que certifica que el sacerdote sufre un trastorno de ideas delirantes que afectan a su comportamiento. Por ello, también han decidido absolverlo, entendiendo que, aunque en ningún momento quiso rectificar ninguna de las opiniones y los comentarios que hizo contra el Islam, su comportamiento está estrechamente vinculado al "padecimiento psíquico que sufre el acusado". como "delirantes", pero no como calificativo sino como realidad "constatable productos de las ideas delirantes y de los padecimientos psíquicos que padece el acusado."