El proyecto YouMinute de la Archidiócesis de Toledo, respuestas sobre el Catecismo en 1 minuto

La iniciativa nació en medio de la complicada situación sanitaria por la covid-19 que impedía la realización de encuentros presenciales

Por Redacción Religión

Tiempo de lectura: 2' Actualizado 10:27

La Delegación de Pastoral de Juventud de la Archidiócesis de Toledo inició el pasado 1 de mayo un proyecto, denominado YouMinute, que consistía en publicar una serie de vídeos de formación en su canal de YouTube.

El proyecto genera un contenido audiovisual de aproximadamente un minuto de duración, en los que se va dando respuesta a cada una de las preguntas que forman el YOUCAT, el catecismo que el Papa Benecito XVI regaló a todos los jóvenes con motivo de la Jornada Mundial de la Juventud de Madrid en 2011.

Han sido unos meses de intenso trabajo en los que más de 50 jóvenes de diversas parroquias, grupos y movimientos de la Archidiócesis de Toledo han ido desgranando un número del YOUCAT. Preguntas directas y concretas a las que nuestros jóvenes dan respuesta en un minuto.

Los 100 primeros videos

El proyecto nació en medio de la complicada situación sanitaria por la covid-19 que impedía la realización de encuentros presenciales. Es por ello que, coincidiendo con el primer encuentro virtual que mantenía el arzobispo de Toledo don Francisco Cerro con los jóvenes, veía la luz el primer video del YouMinute.

El YOUCAT cuenta con 527 preguntas por lo que el proyecto no ha hecho más que empezar. Hasta hoy se han publicado los 100 primeros números y ahora, explican desde la Delegación de Pastoral de Juventud de la Archidiócesis de Toledo, "es momento de hacer una pausa y revisar el trabajo realizado".

El proyecto volverá en el 2021

El proyecto sigue trabajando y volverá a principios del año 2021 con los próximos números del YOUCAT dando respuestas en un minuto.

YouMinute es una invitación a formarnos cada día más, para poder dar razón de nuestra fe y de nuestra esperanza, para darnos cuenta de que nuestra fe es razonable y, sobre todo, porque cuando más conocemos a Dios más podemos amarlo.