Monseñor Argüello: "Quiero ser un obispo Kerigmático, orante y Pastor"

A las 6 de la tarde la Catedral de Valladolid se vestía de gala para acoger la Consagración Episcopal del sacerdote y hasta ahora Vicario General de la archidiócesis vallisoletana, Luis Javier Argüello García, como nuevo obispo auxiliar de esa Iglesia Particular. La Misa ha estado presidida por el Cardenal-Arzobispo de Valladolid, Monseñor Ricardo Blázquez, que ha sido el consagrante principal. Junto a él han concelebrado, entre otros, el Nuncio Apostólico de SS. en España, Monseñor Renzo Fratini, así como el Arzobispo de Toledo y anterior titular de esa archidiócesis Braulio Rodríguez, así como un nutrido grupo de sacerdotes. Al inicio de la Misa ha tomado la palabra Monseñor Fratini quien, ha mostrado en nombre del Santo Padre, el gozo de acompañar al Cardenal Blázquez y a Don Luis Argüello en este momento de la consagración episcopal de este último como auxiliar. Fratini ha recordado que la misión del Pastor es conducir a la amistad con Cristo en estos tiempos de cambio en lso que vive la humanidad. Tras la lectura del Evangelio ha comenzado el Rito de ordenación episcopal con el cántico de invocación al Espíritu Santo - Venir Creator Spirictu-. Tras la presentación del candidato, se ha mostrado y leído la Bula por la que el Papa nombra a Don Luis-Javier Argüello García, obispo auxliar de Ipagro, ha tenido lugar la Homilía de Monseñor Blázquez, Presidente de la Celebración Eucarística. El Cardenal-Arzobispo de Valladolid ha dicho que esto supone un regalo del Sagrado Corazón de Jesús. Por él participan ambos en el servico episcopal y entrega a esa amada Diócesis, viviendo el Evangelio, administrando las Sacramentos y animando la caridad con la fidelidad, formando parte del Colegio Episcopal en comunión con el Obispo de Roma, Pastor de la Iglesia Universal. Monseñor Blázquez, concluyó encomendando el ministerio episcopal de su nuevo obispo auxiliar a la Virgen María. Posteriomente ha seguido el Rito con la promesa del nuevo candidato al episcopado, la invocación a los Santos, la imposición de manos, la Oración de Consagración mientras dos diáconos sotenían el Evangelio sobre su cabeza, así como la imposición de todos sus atributos -Báculo, anillo episcopal y Mitra-. Antes de finalizar la Misa en este día tan señalado, ha sido el nuevo obispo auxliar quien ha tenido palabras de gratitud para Dios que le ha confiado este ministerio, al tiempo que ha renovado su comunión al Papa Francisco para ser un obispo kerigmático y Pastor como le pide en la Bula de nombramiento. Además de la gratitud a los obispos y sacerdotes congregados, así como familiares y fieles de los lugares donde ha ejercido su sacerdocio, ha tenido palabras de recuerdo muy especial para quien rigiese la Archidiócesis vallisoletana por espacio de 20 años y que le confirió el Orden Sacerdotal, Monseñor José Delicado Baeza, ya fallecido. También tuvo palabras especiales para Monseñor Blázquez con quien va a colaborar en el pastoreo de la Iglesia que peregrina en Valladolid.