ÁNGELUS 30/09

María nos ayude a sentir a Dios entre nosotros

Miles de peregrinos han acudido esta mediodía a rezar el Ángelus con el Papa Francisco.

Redacción Religión

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Al reflexionar sobre el Evangelio del día, el Papa Francisco llamó la atención sobre el obrar de Dios, cuya libertad en el donarse a sí mismo a nosotros, constituye un desafío y una exhortación a cambiar nuestras actitudes y relaciones

Jesús hoy nos llama a no pensar según las categorías de "amigo/enemigo", "nosotros/ellos", "quien está dentro/ quien está fuera", sino a ir más allá, a abrir nuestro corazón para poder reconocer su presencia y la acción de Dios incluso en ambientes insólitos e impredecibles y en personas que no forman parte de nuestro círculo: lo dijo el Papa Francisco a la hora del Ángelus dominical, reflexionando sobre el Evangelio del día. (cfr. Mc 9,38-43.45.47.48)

Puntualmente al mediodía del XXVI domingo del tiempo ordinario, el Papa Francisco se asomó a la ventana del Palacio Apostólico para recitar junto con los fieles presentes en la Plaza de San Pedro la oración mariana del Ángelus e impartir su catequesis: 

El Evangelio de este domingo nos presenta uno de esos detalles muy instructivos de la vida de Jesús con sus discípulos. Estos habían visto que un hombre, que no formaba parte del grupo de los seguidores de Jesús, echaba a los demonios en nombre de Jesús, y por eso querían prohibírselo. Juan, con el entusiasmo vigoroso, típico de los jóvenes, refiere esto al Maestro buscando su apoyo; pero Jesús, al contrario, responde: «No se lo impidan, porque nadie puede hacer un milagro en mi Nombre y luego hablar mal de mí. Y el que no está contra nosotros, está con nosotros».

Lee aquí las palabras del Papa Francisco

Jesús libre nos educa también a nosotros a la libertad

El Santo Padre reflexionó sobre la libertad de Jesús, que contrasta con la cerrazón de los discípulos ante un acontecimiento extraño a sus esquemas; y señaló que Jesús quiere educarnos también a nosotros hoy a esta libertad interior:

Juan y los demás discípulos manifiestan una actitud de cerrazón ante un acontecimiento que no entra en sus esquemas, en este caso la acción, aún buena, de una persona “externa” al círculo de los seguidores. En cambio Jesús aparece muy libre, abierto plenamente a la libertad del Espíritu de Dios, que en su acción no está limitado por algún confín o recinto. Jesús quiere educar a sus discípulos, también a nosotros hoy, a esta libertad interior.

Nuestro modelo es María

El Papa concluyó elevando una plegaria a la Virgen Madre, “modelo de dócil acogida” de las sorpresas de Dios:

Que la Virgen María, modelo de dócil acogida de las sorpresas de Dios, nos ayude a reconocer los signos de la presencia del Señor en medio de nosotros, descubriéndolo allí donde Él se manifiesta, incluso en las situaciones más impensables e inusuales. Que nos enseñe a amar a nuestra comunidad sin celos y sin cerrazones, siempre abiertos al vasto horizonte de la acción del Espíritu Santo.

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