altercados tras la derrota
El Sevilla condena y denuncia el ataque vandálico organizado sufrido en la ciudad deportiva tras la derrota contra el Celta
Los jugadores del equipo durmieron debido a las protestas de un grupo de seguidores que llegó a colarse en las instalaciones. La policía cargó contra los radicales que forzaron la valla de entrada.
Los seguidores del Sevilla a las puertas de la ciudad deportiva
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El Sevilla perdió este sábado contra el Celta (3-2), en un partido donde el equipo gallego jugó gran parte del partido con diez jugadores por la expulsión de Marcos Alonso y donde los de Joaquín Caparrós no estuvieron a la altura.
El conjunto hispalense ocupa la 16ª posición en la clasificación y con 38 puntos, tan solo tiene seis de ventaja sobre Las Palmas, que con 32, marca el descenso. Al Sevilla le quedan tres partidos por delante y la situación cada vez es más complicada tanto en lo deportivo como en lo extradeportivo.
El enfado de la afición sevillista es cada vez mayor y durante la noche del sábado se produjeron momentos de tensión en la ciudad deportiva tras la llegada del equipo. Numerosos seguidores acudieron a reprochar a la plantilla la mala temporada, reclamaron la salida de los futbolistas y de la directiva y, finalmente, terminaron entrando a las instalaciones tras forzar una puerta de hierro.
La policía tuvo que intervenir ante la situación y lo hizo cargando contra los radicales. El Sevilla, con el objetivo de evitar más problemas, optó porque los jugadores se quedasen a dormir en la ciudad deportiva y ha reaccionado este domingo con un duro comunicado condenando lo sucedido.
"Condenamos de manera contundente el ataque vandálico organizado este sábado por la noche en la Ciudad Deportiva José Ramón Cisneros Palacios", son las primeras palabras del texto publicado en la web del club.
Y prosigue: "Entendemos que la situación deportiva del equipo, que no es la deseada, acarree protestas, pero en ningún caso serán admitidas si van acompañadas por agresiones, amenazas o acciones vandálicas".
El Sevilla, además, ha anunciado que denunciará ante las autoridades "las agresiones de inusitada violencia recibidas por sus empleados, jugadores, staff técnico y dirigentes a su llegada a la ciudad deportiva". Y también "solicita a las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad la máxima diligencia para llegar hasta los últimos responsables de estos hechos deleznables, perpetrados por una banda de radicales organizados que actuaron con extrema violencia".