La fuente de esperanza para muchos en Cuba es la fe

Redacción digital

Madrid - Publicado el - Actualizado

1 min lectura

“Amo la libertad y decido responder con la paz y el perdón”. Son palabras del sacerdote cubano Rolando Montes de Oca tras sufrir su casa un nuevo ataque por parte de grupos organizados del régimen castrista. Nos resulta difícil imaginar el precio de decir la verdad en algunos lugares del mundo. Para este párroco cubano, cuyo testimonio hemos escuchado en COPE, denunciar la falta de libertad y las penurias económicas de su gente se traduce en insultos (gusano asqueroso), en acoso a su vivienda (lanzamiento de huevos), o en la difusión de mentiras para desprestigiarlo entre su pueblo. El objetivo es simple: intimidarle hasta lograr que calle, o forzarle a abandonar el país.