Mons. López Llorente: "La ceremonia de clausura ha sido realmente emotiva"

No todos los días se cumplen 775 años. Una cifra a la que llegó hace doce meses la diócesis de Segorbe-Castellón y por la que se le ha concedido el Año Jubilar que ayer terminó. Para clausurarlo, se celebró una eucaristía presidida por el nuncio de la Santa Sede en España, monseñor Bernardito Auza.

"El Año Jubilar se ha disfrutado durante los 12 meses y hay que dar las gracias a Dios y a todos los que han participado y colaborado en las acciones que se han llevado a cabo", ha explicado en 'Mediodía COPE' a Pilar García Muñiz el obispo de Segorbe-Castellón, monseñor Casimiro López Llorente, que se encontraba hoy en Madrid participando en la Asamblea Plenaria de la Conferencia Episcopal: "Son los temas que nos traemos entre manos, se dan unas pinceladas y el nuncio nos apunta un poquito las que son las prioridades actuales del santo padre, ya que él es el representante, y así nos damos mutuo apoyo en comunión para juntos salir a la misión con la fuerza del espíritu santo. Eso es la Iglesia".

"Ha sido un año con actos de todo tipo: culturales, de difusión, de evangelización, de celebración... y a mí lo que más me ha llegado han sido las peregrinaciones a la Catedral, que es donde se ha visto la participación real del pueblo de Dios", ha explicado en 'Mediodía COPE' el obispo de Segorbe-Castellón, monseñor Casimiro López Llorente. "La ceremonia de clausura fue realmente emotiva y no solo la celebración, que fue solemne, sino ver la alegría de la gente. Fue muy hermoso".

Diócesis de Segorbe-Castellón

La diócesis de Segorbe-Castellon es una de las más pequeñas en superficie de todo el país. Ocupa dos terceras partes de la provincia de Castellón y cuenta con más de 420.000 bautizados y unos 200 sacerdotes.