Lorena Fernández: 'En los planes de Educación sobre Primaria subyace el aprobado general'

Si hoy los padres y madres de los niños mayores de 12 años están más preocupados por cuando les vacunan o no del COVID antes del arranque del curso escolar los que tienen menos de esa edad -en concreto los que están en Primaria que abarca desde los 6 hasta los 12- andan como con la mosca detrás de la oreja por esos cambios que el Ministerio de Educación quiere imponer en el curriculo. Que Isabel Celaa se ha ido con toda la polémica detrás pero que su sucesora, Pilar Alegría no está dispuesta ni a mover una coma.

Como gusta en general a todo el que gobierna adoctrinar desde un despacho lo que se debe estudiar desde un pupitre.

¿Y por donde van esos cambios? Pues hay varios flancos abiertos. Por un lado está la asignatura 'Valores Cívicos y Éticos' que no es más que la versión actualizada de la Educación de la Ciudadanía que en su día Zapatero se sacó de la manga. Asignatura que pretende instruir a los alumnos de quinto y sexto de Primaria sobre identidad de género, empoderar al alumno como 'agente del cambio social' e implicar en ello a la familia. Ese es un flanco.

El otro que ya sabíamos es que desde los seis años se promueva la educación afectivo-sexual. Un tercero es potenciar los dialectos en la asignatura de Lengua.

Pero hay más y quizás este ha sido el que más polvareda ha generado. El de que las matemáticas tengan, ojo, un sexto sentido: un enfoque socioemocional. Dice el borrador del ministerio la siguiente reflexión que a ver cómo se come esto en una clase. Los saberes básicos de matemáticas deben incluir destrezas esenciales para entender las emociones cuyo correcto manejo 'mejora el rendimiento' y ayuda a erradicar ideas preconcebidas relativas al género o el mito del talento innato indispensable para esta materia.

A ver cómo encajamos esto en mitad de las sumas, las restas, las multiplicaciones, divisiones o en la raíz cuadrada que se estudia en Primaria. Se lo hemos preguntado en 'Mediodía COPE' a Beatriz. Ella es docente precisamente de Matemáticas: “Evidentemente estas palabras como que hay que reconocer las fuentes del estrés, desarrollar la resiliencia, no lo vamos a conseguir si vamos a dar aprobados generales, qué es lo que está presente en esta nueva Ley Celáa”.