EN 'LA TARDE'

“La situación que estamos viviendo en El Raval es aterrorizante”

El barcelonés barrio de El Raval está sufriendo una plaga de “narcopisos”, edificios ocupados por traficantes en lo que se vende todo tipo de droga.

Tiempo de lectura: 2' Actualizado 08 mar 2024

La crisis que se ha abierto en este famoso barrio de Barcelona está afectando de manera directa a los vecinos, que día tras día tienen que ver cómo drogodependientes acuden en masa a estos pisos en busca de su dosis de heroína.

En ocasiones una vez dentro del piso estos traficantes prestan alguna habitación para puedan inyectarse e incluso algunos de estos “narcopisos” cuentan con taquillas para que los clientes puedan dejar sus pertenencias mientras se drogan.

ESCUCHA LA ENTREVISTA COMPLETA | Nuria, propiertaria de un piso en El Raval

Uno de estos edificios, situado en la calle d'En Roig, cuenta con tres “narcopisos” y por sus escaleras suben al día alrededor de 70 drogodependientes empujando así a que todos los vecinos del portal hayan abandonado sus viviendas.

Cómo no se les puede desocupar se ríen de todas nuestras protestas

Nuria es propietaria de uno de los pisos de ese inmueble, aún sin vender, pero ella ya no vive en su interior debido a las circunstancias que se dan en el resto de pisos. En 'La Tarde', nos ha explicado cual es la verdadera situación que viven los vecinos en este momento.

La vecina de El Raval soñaba con dejar la casa en propiedad a su hija, pero por el momento parece difícil que vaya a ocurrir. “La situación que estamos viviendo es imposible de describir, es aterrorizante”, relata Nuria. “El piso lo tengo cerrado e incluso he tenido que instalar una alarma, ahora solamente voy cuando cuando tengo un aviso”, lamenta.

Nuria asegura cada vez que intenta acceder a su edificio tiene que hacerlo con ayuda de la Guardia Urbana. “En el rellano del edificio hay colchones con gente durmiendo y está lleno de jeringuillas llenas de sangre”, asegura. “Todos los drogodependientes siempre están atentos de cuando entro y cuando salgo, tengo miedo que algún día me hagan algo”, explica.

Cómo no se les puede desocupar se ríen de todas nuestras protestas, esto avanza muy rápidamente”, afirma