"Fui a buscar olas y un traspiés me dejó colgando de un acantilado"

El libro 'Solo' refleja la situación real a la que se tuvo que enfrentar el empresario y surfista empedernido Álvaro Vizcaíno

Redacción digital

Madrid - Publicado el - Actualizado

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¿Qué harías si tu vida pendiese de un hilo y estuvieses solo ante la fuerza de la naturaleza?

La película “Solo” refleja la situación real a la que se tuvo que enfrentar el empresario y surfista empedernido Álvaro Vizcaíno.

Hace cuatro años cayó por un acantilado en Fuerteventura, se rompió la cadera en tres partes, se lesionó una mano, y quedó solo, a la intemperie, sin poder contactar con nadie, a merced de la naturaleza. Estuvo más de 48 horas abandonado a su suerte.

En 'La Tarde', Vizcaíno ha contado lo que ocurrió aquel fatídico día y que ha reflado de forma novelado en un libro del mismo nombre que la cinta: 'Solo' (Ediciones B)

"Un volantazo me llevó a una decisión repentina a atravesar las dunas del sur de la isla de Fuerteventura, que no era mi plan acabar en esa zona. Un recuerdo de alguien que me llevó a ver el panorama más espectacular de la isla, y como buen surfista, llevaba mi 4x4 y la tabla de surf para buscar olas y un traspiés me dejó colgando de un acantilado.

La historia completa es que imaginaros un mar de dunas y que mueren en acantilados de kilómetros. Es una zona inhóspita. La ultima duna con el efecto del viento y de la humedad, en vez de ser arena suelta era arena solidificada, con una capita de arena encima, si eso lo inclinas 45 grados acaba siendo una rampa imposible de parar. Por ahí resbalé unos 20 metros y solo conseguí detenerme en el borde, con las manos, la cara, el cuerpo apretado, pero mis pies colgando. Abajo me esperaban rocas y doce metros de caída.

Decidi que si me tiraba y conseguía caer encima de una ola quizás me salvaba. Y así lo hice

La decisión fue y ahora qué hago. Si me caigo, que me voy a caer igualmente, mentalmente hice una estadística. 50 que me mato, 50que quedeo muy mal herido. Cuando decimos muy malherido es que me iba a caer de espalda sobre las rocas puntiagudas.

La decisión fue que no veía nada. Lo único que percibía era el sonido de las olas batir en el acantilado. Empecé a contar el periodo que hay entre ola y ola. Decidi que si me tiraba y conseguía caer encima de una ola quizás me salvaba. Y así lo hice.

La cosa salió bien, entré en el 50 por ciento que quedaba muy mal herido pero no me toqué la columna.

Me empujé con los brazos todo lo fuerte que pude y como un gato salté con mi cabeza hacia el mar para llegar lo más lejos posible. Mi cabeza entró en el mar. Y mi columna. Una mano me rozó con una roca.

De allí tenía que salir, porque subía la marea y estaba entre las rocas y no tenía ninguna oportunidad. Decidí salir nadando hacia una calita que había a unos 400 metros. Por el camino pasaron unas cuantas cosas.

Estuve a punto de ahogarme, con convulsiones, desmayos... Milagrosamente, cuando todo estaba perdido conseguí salir de la oscuridad. 

El tercer día decidí que tenía que salir de allí porque hacía muchísimo calor, llevaba dos días, la herida empezó a oler mal, amarilla. A lo mejor viene alguien, pero llevo dos días y no pasa nada. Encontré un poco de agua, flotando vino a rescatarme.

Andar era imposible, me desplazaba con los codos. Mi mayor miedo era entrar al mar en el que casi me ahogo dos días antes, pero mi mayor miedo se convirtió en mi objetivo, porque era el único medio en el que yo podía manejarme.

Me entablillé el brazo con una madera, había basura, y conseguí flotar con una especie de corcho y me metí a un mar de posibilidades. Al final un puntito en el horizonte acabó siendo un barco y nadé durante más de una hora hasta que conseguí hacerme ver por ese barco y vinieron a buscarme. Era un día muy bueno y me oyeron desde lejos. Vinieron a por mi y me rescataron".

Toda esta historia, además de en una película se ha transformado en un libro, también titulado 'Solo'. 

Ese libro es "una búsqueda de propósito vital" además de un "relato mis vivencias". "Es un libro de ficción pero está basado en personajes y en historias reales. Es un camino".

Propósito vital quiere decir, según ha contado Álvaro en 'La Tarde', que "el personaje de Álvaro estaba completamente insatisfecho con su vida y decide cambiar. A pesar de tener todo. Negocios, planes sociales, y aun así algo faltaba. Tuvo que hacer todo el camino y pasar las pruebas  adecuadas o el azar, que le dieron la respuesta".

En su fatídicas 48 horas, Álvaro se topó "con los miedos del ser humano: la muerte, la soledad, la enfermedad, el fracaso. En esos dos días hice un máster en eso. Cuando uno se acerca tanto a la muerte, ve un mensaje de urgencia de vida implícito".

Cuando volvió a la vida, a Álvaro "todo el mundo" le preguntaba si pensaba en sus padres o en sus seres queridos para salir de allí. Y si eso lo  motivaba. "Claro", responde. "Pero lo que más me impresionó es que en varios momentos, cuando estuve desmayado en el vacío y tuve dos días para presentir la muerte, me di cuenta de que si te guardas algo de lo que estás arrepentido por no haberlo hecho o por haberlo hecho, en el último segundo de tu vida, ese pensamiento, viene certera a buscarte".