"A Sánchez esto de la bronca contra la prensa le viene muy bien porque así le roba espacio a Podemos y a Sumar"

El director de 'La Mañana Fin de Semana' lanza un mensaje a Óscar Puente después de que criticara al corresponsal de COPE y ABC en Washington por preguntar a Trump por el gasto en Defensa de España

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Muy buenos días a los madrugadores del fin de semana. Muy buenos días a la gente, gente, en este domingo 19 de octubre en el que vamos a tener cielos cubiertos. Desde las 6 de la mañana estamos aquí contándote noticias, ofreciéndote análisis.   

Hace ya mucho tiempo, yo tenía la redacción de la tele en la que trabajaba un compañero que se llamaba José María. José María era de San Sebastián y siempre que salíamos de la redacción a la calle miraba a la izquierda y a la derecha. Y es que José María se había venido a Madrid porque estaba amenazado por ETA.

Un lunes nos dijo que había estado en su tierra, pero ese lunes no nos habló de la lucha antiterrorista ni del comando Donosti. Nos dijo que había estado en un concierto de unos chicos estupendos de Donosti y que a la cuadrilla se les caía la baba con esos chicos. Amaia Montero cantaba entonces esto que estamos escuchando.

En unas horas se ponen a la venta las entradas de la gira de La Oreja de Van Gogh con Amaia Montero. Las canciones de la Oreja llegaron hace ya casi 30 años. Eran canciones simples, si quieres un poco tontas. Y claro, no querías cantarlas, no querías escucharlas porque tú eras más de Bob Dylan, de Pink Floyd, del primer Police, de U2, pero ahí estaban esas canciones que no se te iban de la cabeza.

La Oreja cantaba cosas como esta. Sin ti ya no podré escuchar la buena vida más. Canciones de amores que se habían acabado, de amores acabados, pero de enamorados que seguían estando enamorados. Sin ti ya no podré escuchar la vida más. Sin ti no podré volver a reírme de aquel final. Sin ti la vida no es vida, decían aquellas canciones.

Canciones quizá un poco tontas, pero canciones de las que no te podías desenganchar porque hasta el más duro, el más cansado, el más escéptico, el más cínico sabe de qué habla una canción como esta que dice, "Sin ti, sin la persona a la que se quiere, no se puede reír de verdad, no se puede llorar de verdad. Sin ti yo no soy yo".

Sánchez ayer disfrutó del sábado. Se fue a Ámsterdam a la clausura del Congreso del Partido de los Socialistas Europeos. El lunes estuvo en Egipto aplaudiendo el plan de paz para Oriente Próximo de Trump, conocido progresista Trump. Y ayer estuvo con los socialistas europeos haciendo una de las cosas que más le gusta hacer, advirtiendo del peligro que supone para la democracia que derecha y ultraderecha cabalguen juntas. Cuando ellos atacan nuestras conquistas, ellos están minusvalorando lo fundamental de la democracia, venía a decir ayer Pedro Sánchez.

Uno de los pilares de la democracia es la libertad de expresión, la libertad de prensa, que los periodistas puedan publicar lo que quieran publicar y que puedan preguntar lo que quieran preguntar. Sánchez, en defensa de la libertad de prensa advirtió en septiembre de que Trump era un peligro para las libertades. Lo dijo cuando Trump exigió la suspensión del programa de Jimmy Kimmel, cómico de la cadena ABC.

Lleva razón Sánchez. Llevaba razón. Un verdadero demócrata respeta, alienta la libertad de expresión. Un verdadero demócrata no pide el cese de un cómico, no pide que se anule su programa, que se quite de la parrilla y un verdadero demócrata no le molesta que los periodistas pregunten.

Ya te acordarás de que cuando se abrieron las diligencias judiciales para investigar a su mujer en abril de 2024, Sánchez montó aquel teatrillo de que estaba pensando marcharse, dejar la presidencia del gobierno. Bueno, luego volvió porque no se había ido y anunció un plan que llamó de acción democrática. Había que luchar contra los bulos y el plan llegó al Congreso en julio del 24.

Sánchez dijo eso de que había que distinguir a los verdaderos medios de los falsos medios. Como Sánchez sabía perfectamente que estaba pisando un terreno muy resbaladizo porque no se le puede otorgar al gobierno, la capacidad de decidir qué medio es un auténtico medio, ni se le puede dar al gobierno la capacidad de decir que es un bulo y que es una información eh auténtica y veraz, como eso no se puede hacer porque eso socavaría los fundamentos de la democracia.

Sánchez se apresuró a decir en julio que él no iba a decidir qué medios eran fiables o no fiables y que no iba a repartir carnés de buen periodista o de mal periodista.

Llevaba razón Sánchez también en esto. Un gobierno no puede decidir la fiabilidad de un medio. Claro, si un gobierno o el ministro de un gobierno quiere dar carnet de buenos periodistas, ese gobierno está limitando la libertad de expresión. ¿Y qué diremos si un gobierno o un ministro le dice a un periodista lo que puede preguntar y si un ministro de un gobierno decide cuándo un periodista es patriota o no patriota? Pues diremos que eso es intolerable.

Pues eso es lo que ha hecho en las últimas horas el ministro Óscar Puente. Con esa actitud de macarra que tiene en redes sociales, ha dicho que el corresponsal de ABC y de la COPE en Washington, David Alandete, no es un buen patriota porque le preguntó lo que le preguntó a Trump el viernes. El gobierno contra los periodistas que preguntan.

David Alandete le preguntó el viernes a Trump varias cosas. Le preguntó si era consciente de que la OTAN no puede expulsar a un país. Le preguntó esto a Trump porque Trump había amenazado con expulsar España de la OTAN. Y Alandete le preguntó a Trump cómo iba a concretar los aranceles con los que amenaza España si España no incrementa su gasto en Defensa.

Esas esas amenazas no se pueden concretar. A menos que Trump castigue a toda la Unión Europea con más aranceles porque España está dentro de la Unión Europea. Esto es lo que preguntó Alandete.

Óscar Puente ayer en un post en X la red social acusó a David Alandete de no ser un buen patriota por utilizar su acreditación de prensa en la Casa Blanca para preguntarle todos los días a Trump por los supuestos incumplimientos de España en el gasto de Defensa. Es decir, Óscar Puente, ministro del Gobierno de España, se arroga la potestad de definir quién es buen patriota y de definir quién es mal patriota.

Según el ministro Óscar Puente, un periodista debe suspender la libertad de prensa para servir a la patria del modo en el que el Gobierno dice que hay que servir a la patria. Queridos periodistas, dice Óscar Puente, dejad de preguntar por qué hay que defender a la patria. El razonamiento es autocrático. Si se puede llamar razonamiento, lo de Óscar Puente.

Si quiere, señor Puente, son las 8:09 minutos. Llama a la redacción, el teléfono de la cadena COPE está en Internet y nos dice qué podemos decir o qué no podemos decir los periodistas de esta cadena. Ya se lo ha dicho usted, señor ministro, a nuestro corresponsal, ahora nos dice a nosotros qué podemos decir y qué no podemos decir para ser buenos patriotas. Llueve sobre mojado porque la ministra de Defensa, la ministra Robles, ya criticó al periodista de la agencia EFE por preguntarle a Trump por el gasto de defensa.

Bueno, pues, señora Robles, ministra Robles, con el máximo respeto y con todo el cariño le digo que nosotros estamos aquí para preguntar lo que creemos que es relevante al presidente de Estados Unidos o a quien haga falta, porque es nuestra obligación, porque nos debemos a nuestra audiencia, porque nos gusta hacerlo, porque vivimos en una democracia.

A Sánchez, en realidad esto de la bronca contra la prensa le viene muy bien porque así le roba espacio a Podemos y a Sumar. Sánchez dice que está sudando la camiseta para sacar adelante los presupuestos.

Bueno, Sánchez no está sudando ninguna camiseta. De hecho, Sánchez después de decir esto decía también que él está a gusto con la situación.

Sánchez hasta el mes de diciembre de 2026 tiene tiempo para completar los fondos Next Generation. Faltan por llegar 25.000 millones de euros en subvenciones y más de 60.000 millones de euros en créditos. Con este chutazo, Sánchez está convencido de que puede acabar la legislatura.

Y lo de Koldo, Ábalos y Cerdán, pues balones fuera. El juez Puente, que es otro Puente, ha emitido dos autos esta semana. Diciendo que aunque no establezca prisión preventiva para Koldo y Ábalos, hay sólidos indicios de criminalidad y que más adelante puede haber esa prisión preventiva.

El juez Puente cometió un error, se metió en camisa de 12 varas porque habló de un estupor, de su estupor, porque Ábalos sigue siendo diputado. Cometió un error, es verdad, porque el juez en España no está para decir lo que hay que hacer con las leyes, sino para aplicarlas. Es boca de la ley. Le faltó tiempo al gobierno para ponerlo a caldo, porque claro, es que en España hay periodistas que no son patriotas y jueces que somos malos, muy malos.