"No lo aplaudieron, no vaya a ser que su sanchidad se lo chive"

Expósito analiza el homenaje a Jorge Azcón y la actitud de los parlamentarios socialistas

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Sobre la escena inenarrable en las Cortes de Aragón, en el Parlamento Regional. El presidente de la comunidad autónoma, Jorge Azcón, anuncia que entregarán el premio Gabriel Cisneros a los valores constitucionales, de manera póstuma, in memoriam, a Javier Lambán, expresidente de Aragón, socialista que falleció hace un par de meses por un cáncer. Se produce un aplauso. 

Pero observa la escena: cuando termina la ronda de aplausos, uno se da cuenta de que casi la mitad del hemiciclo —23 parlamentarios— no aplauden. 23 parlamentarios del grupo socialista. Ojo: hay tres que como que intentan arrancar, pero claro, cuando ven que aquello se para…

Hoy han explicado por qué no aplaudieron. Han dicho que el presidente Azcón, el actual, estaba utilizando políticamente la memoria y la figura de Javier Lambán. Encima, mentirosos. No aplaudieron porque Lambán fue crítico con Pedro Sánchez. No aplaudieron por pelotas. No lo aplaudieron, no vaya a ser que su sanchidad se lo chive o vea quién era el que aplaudía al crítico y no al líder.

Oh, amado líder, adoración suprema. Que no se le moleste, no se le importune y no se le critique, como hizo Javier Lambán en vida. ¡Qué vergüenza, qué humillación! ¡A dónde llega el peloteo, eh!