Ana Medina: "Muere Vinicio, el hombre cuyo rostro desfigurado trasfiguró el Papa con un abrazo"
Es una de las imágenes que han marcado el pontificado del Papa Francisco. Se trata del abrazo que le dio a Vinicio, un hombre con la cara llena de tumores
Madrid - Publicado el - Actualizado
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Hemos conocido y llorado la muerte de alguien que jamás pensaría ser noticia en los medios. Su nombre es Vinicio y todos tenemos aún grabado su abrazo con el papa Francisco a pocos meses del inicio del pontificado.
Su rostro, desfigurado por una enfermedad genética, no fue obstáculo para que el Papa, al saludar a personas que padecían enfermedad, lo abrazara largamente en una imagen que dio la vuelta al mundo.
¿Por qué tuvo tanta repercusión ese abrazo? Porque muchos, al ver los cientos de tumores que desfiguraban su rostro, tuvieron o tuvimos la misma reacción que muchos de sus vecinos de Vicenza, al norte de Italia: rechazo, deseo de mirar hacia otro lado. Es a lo que Vinicio estaba acostumbrado. Pero el Papa transfiguró con su amor esa apariencia desfigurada e su gesto fue portada de numerosos informativos.
Ahora Vinicio, a quien los médicos habían augurado vivir sólo 30 años, ha fallecido a los 63. Su vida ha estado acompañada de dolores, fragilidad y marginación, hasta ese día en que el Papa le abrazó y le besó. En una entrevista concedida entonces, este italiano reconocía que, entre los brazos de Francisco, le pareció que el corazón se le salía del cuerpo, que se sintió en el paraíso y que experimentó una gran paz cuando el Papa le acarició primero la cabeza, y luego las heridas, lo atrajo hacia sí, lo abrazó fuerte y le besó en la cara.
No es el único ejemplo de la sensibilidad que Francisco tiene hacia lo descartado, lo frágil, pero sí fue la más llamativa en ese arranque de su pontificado. El Papa sabe que tenemos miedo a la vulnerabilidad y, que la cultura omnipresente nos empuja a negarla. Pero, con su coherencia entre palabra y obra, nos descubre que podemos andar otro camino: el de la fraternidad. Descansa en paz, Vinicio, y gracias por poner tu parte para despertarnos un poco de nuestro sueño.