"Lo que el miércoles, según Míriam Nogueras, se había acabado, ayer resucitó. Matrimoniadas de Sánchez y Puigdemont, ni contigo ni sin ti"
El director de 'Herrera en COPE' analiza la actualidad que marca la jornada
- 6 min lectura
Señoras, señores, me alegro. Buenos días.
Total que como el que no quiere la cosa, se nos ha caído encima el 14 de noviembre ya de 2025, es viernes. Está por ahí la borrasca Claudia que hoy va a dejar agua en casi toda la península. Canarias ya se va normalizando, hombre, y las alertas se tranquilizan. Pero Maldonado hace un momento nos ha contado que en cuanto se vaya Claudia viene otra. O sea, que hasta el lunes, martes, seguramente la cosa va a seguir más o menos así.
Bueno, ayer nos curamos en salud y ya le dijimos: "Hombre, con el historial del tal Spielmann este, el abogado del Tribunal de Justicia Europeo, perdón, el abogado, el señor Spielmann, el abogado que luego en cuyos dictámenes se basará el Tribunal Europeo para decir si sí o si no a la amnistía en España, iba a darnos en atención a su historial seguramente una de cal o una de arena.
Bueno, depende para quién lo vea, porque, por ejemplo, ayer fue un día para el gobierno bueno, muy bueno.
Después de la sesión del miércoles, pues ha llegado la calma y además encima ha acabado el juicio al fiscal general del Estado. Va a haber unos cuantos días en los que al menos de eso no se va a hablar, pero tuvo buenas noticias el gobierno porque el abogado del Tribunal de Justicia Europeo dio a conocer su opinión sobre unas cuestiones prejudiciales planteadas contra la ley de amnistía y hombre, le pone algunos peros a la ley de amnistía, pero fundamentalmente dice adelante aval político de la ley.
El abogado dice que es legítimo que se puedan amnistiar delitos de terrorismo y que además eso, aquel golpe no afectó a las finanzas europeas. Son objeciones de carácter técnico, mantiene que se ha vulnerado el derecho europeo cuando se imponen plazos muy breves al Tribunal de Cuentas para aplicar la amnistía, pero ya les digo, eso es ciertamente menor.
Lo sustancial es que avala la pestosa argumentación pública y política que se ha hecho para justificar esta ley, dice que no es una autoamnistía. ¿Cómo que no es una autoamnistía? Una ley que se hace a los 10 minutos de haberse acabado las elecciones, echando las cuentas de los políticos que te hacen falta para formar una mayoría cuando, por cierto, tú 20 minutos antes de las elecciones estabas diciendo que la amnistía era inconstitucional.
A ver si eso no es una autoamnistía. Y dice además que ha logrado la normalización de Cataluña como si fuera Sarajevo. Miren, hasta en tres ocasiones Spielmann se refiere a este asunto de la autoamnistía que era una de las severas objeciones políticas presentadas por el abogado de la Unión Europea, que es otro, no es este, es otro, contra la ley de amnistía. Con lo cual, esto parece un ajuste de cuentas entre los dos, el abogado de la Unión Europea y el abogado del Tribunal de Justicia.
Este dictamen no es vinculante, pero es el punto de partida para la deliberación que va a llevar a cabo el tribunal finalmente y el primer trimestre del año veremos qué pasa. Claro, el gobierno ha lanzado la campana al vuelo.
Si fueron capaces de manipular el dictamen de la Comisión de Venecia, imagínense lo contento que estará Gracita Bolaños con este dictamen tan comprensivo. Ya habrá grabado tres o cuatro vídeos de TikTok, con confetti, cheerleaders.
Esto quiere decir que la vuelta de Puigdemont es inminente. Aún no. Primero falta que la sentencia confirme el desnortado criterio de este abogado general. Y si así fuera, veremos cómo se las objeciones a los últimos contenciosos y el mantenimiento o suspensión de las medidas cautelares dictadas por el juez Llarena. Así que bueno, claro, y esto luego inmediatamente qué maravilla, esto se envolvió en un papel de regalo de ramo de flores y se le dio a Míriam Nogueras.
Mira, Míriam, este gobierno de la mano tendida lo que ha hecho contigo, que te pones aquí a gritar como una posesa contra nosotros y este teatro que haces del absurdo cada vez que apareces, pues nosotros te regalamos esto que hemos conseguido porque indudablemente hemos presionado para que este hombre nos entienda y bla-bla-bla.
Bueno, pues los aguerridos diputados de Junts, que el miércoles llamaban cínico e hipócrita a Sánchez, tal y cual, en la votación salían en su rescate evitando que pudiera triunfar la propuesta del PP de prorrogar la vida de las centrales nucleares.
O sea, lo que el miércoles, según Míriam Nogueras, se había acabado, ayer resucitó. Matrimonios, matrimoniadas de Sánchez y Puigdemont, ni contigo ni sin ti. Parole, parole, pipine, lo que prefieran. Cuelga tú, no, cuelga tú, no. Sí, qué cansinos son los dos. ¿A ver, tiene esto trascendencia práctica?
Hombre, pues no mucha. De haber salido la enmienda en la que se dice que no se cierren las nucleares, el gobierno se lo hubiera pasado por el forro del pantalón. Ignoraría seguro la decisión del parlamento. Ha dicho que no va a aplicar, por ejemplo, lo que ayer sí se aprobó, que es la obligación de Renfe de indemnizar a los viajeros por los retrasos, cosa que se hacía al principio, pero que no se hacía ahora.
Dice el ministro Óscar Puente que, hombre, porque si Renfe lo tiene que hacer, no las demás. No le falta razón Óscar Puente en una cosa: si Renfe fuera el único operador que va por las vías de Adif, esto es comprensible que se siguiera haciendo, a excepción de cuando la culpa sea de Adif, no de Renfe, es decir, que se ha roto la vía, la catenaria o lo que sea.
Pero claro, si a Renfe se le obliga a hacer eso y Renfe llega tarde porque el tren que va por delante, las vías están saturadas, cinco minutos por delante se para, se rompe, sea un tren de Iryo o de Ouigo o lo que sea, claro, Renfe no tiene la culpa.
Si fuera el único operador tiene su sentido, pero no siéndolo. En fin, bueno, el caso es que olvidemos esto. Sánchez respira, ha podido vender que las bravatas de Junts solo son postureo y que mantiene su mayoría. Dice que en el fondo Junts estaba deseando algún gestito, algo para recomponer. Y aunque con esto hay dos políticas que se frotan las manos: una es Silvia Orriols, que le habrá quitado a Junts otro zurrón de votos en Cataluña, y María Guardiola, la presidenta extremeña, a la que el PSOE le ha hecho el regalo ideal, que es oponerse a la continuidad de Almaraz.
Almaraz es una central nuclear en la provincia de Cáceres, que es vital para toda una comarca. 4000 empleos directos, indirectos, lo que hay, 4000 empleos que dependen directa o indirectamente de esa central más toda la vida que genera en torno a ella.
Si eso se cierra, eso no se sustituye por una fábrica de petardos mañana, eso hunde esa comarca. Y claro, María Guardiola, qué maravilla, puede salir. Oiga, ahí están los socialistas. Cuando Miguel Ángel Gallardo, que es el candidato extremeño de los socialistas, se hace un lío él solo diciendo esto que ustedes van a escuchar acerca de lo de Almaraz.
Ah, no, seguro. Almaraz no se va a cerrar. Pues eso no dice la ministra, ni el presidente del gobierno, ni el otro, ni el de la moto. Bueno, bueno, bueno, bueno. Tiempo al tiempo.