La lucha contra los incendios es algo que en Portugal se toman muy en serio. Y más, después de las tragedias que han provocado las llamas en los últimos años.

El gobierno portugués ha decidido lanzar una nueva oferta de empleo público para doscientos guardas forestales.

Más de 2.500 personas ya han solicitado acceder a estas oposiciones para conseguir un puesto.

Hasta aquí todo correcto. Lo inusual llega cuando los candidatos han revisado los requisitos necesarios para optar a esas plazas.

Unas condiciones que quizá no cumplan la mayoría de los aspirantes por lo estricto de su contenido.

Si tienen caries, diabetes o incluso hemorroides no podrán optar a la plaza. Pero tampoco, y ojo al cabreo de cientos de portugueses por esta condición, si sufren problemas de alopecia, es decir, si son calvos.

A esta hora, seguimos esperando los argumentos que han llevado a la administración portuguesa a discriminar a tanta gente, por su falta de pelo...

Dice el Gobierno de Portugal que esta medida es para incrementar el número de vigilantes...

Pero, a este paso, con tanta exigencia, se van a quedar sin candidatos.