Antonio Agredano y los 'motivados': "Desconfío de quien lo tiene todo planeado y de quien no se ha salido del carril"
El cronista de Herrera en COPE retrata sus entusiasmos a medias y esos motivos de 'motivación' ante hechos imposibles.
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Antonio Agredano ha abordado hoy en sus 'Crónicas Perplejas' aquellas personas que buscan un motivo y una justificación para hacer cosas imposibles.
"Motivados"
Motivados, por Antonio Agredano | Crónicas Perplejas
"Soy de ese tipo de hombres que se llevan las zapatillas de running allí donde viajan. Y tengo un 45 de pie. Planeo mis rutas, mis kilómetros, cuándo tendré un hueco para salir a correr. Pero luego llego, y me apetece un vino, y mi entusiasmo se va diluyendo. Y hasta el día del regreso, ahí se han quedado las calzonas y la camiseta de tirantes, al fondo de la maleta. Intactas. Como las zapatillas, dentro de su bolsa de plástico, grandes e inútiles, de un lado para otro. Pasajeras intrascendentes. La motivación llega hasta hacer el equipaje. Y poco más.
Soy un hombre de principios. Me cuesta terminar las cosas. Quise ser estrella del rock y novelista de éxito. Quise ser futbolista y un prestigioso abogado. Pero los días pasan como los camiones de basura en la madrugada. Con ese estruendo, recogiendo todo aquello que dejamos atrás. La vida siempre nos da nuestro espacio y nuestro lugar.
Yo ya he dejado de fustigarme. Ya no arrastro la culpa como un fantasma su cadena. Asumo mis incoherencias y mis pasiones. Que el cansancio a veces manda. Que el talento no da para todo. Que no vale siempre con esforzarse, que hay días en las que las cosas simplemente no salen. Que hay domingos de sofá. Que la existencia aprieta y que hay que soltar, descorchando una botella, o ahorrándonos un puñado de palabras.
A veces hay que hacer las cosas porque sí. Y levantarse la falda y dar un taconeo a lo María Jiménez. Y salir del escenario sin dar más explicaciones con la mano en alto y el pelo desordenado.
Desconfío de quien lo tiene todo planeado. Desconfío de quien no se ha salido del carril. Desconfío del que nunca se ha equivocado. La vida es cielo y suelo y luego suelo y cielo. En un vaivén interminable. De sombras y luces y éxitos y adioses. Pero aquí estamos. Arrastrando nuestras contradicciones. Luchando contra nosotros mismos. Con un inesperado, e inexplicable, entusiasmo"