Aprende a cocinar en prisión y se convierte en un chef de éxito

¿Cuántas oportunidades tiene un hombre de rehacer su vida? Muchas, no lo dudes. Y Jeff Henderson es un claro ejemplo de que cualquier persona es capaz de crear un nuevo futuro, de ser alguien diferente, de mejorar en aquellos aspectos que no le han funcionado en el pasado.

Jeff nació en el el sur de Los Ángeles, en un barrio donde la delincuencia era más que una realidad. Era la forma de pensar, sentir y vivir de muchos jóvenes. A su situación se añadía otra más complicada aún: su familia tenía muy pocos recursos económicos. Como él mismo confiesa, había días en los que no sabían qué iban a comer.

El joven Jeff comenzó a ver que con la venta de drogas tendría un dinero fácil que le haría convertirse en una persona con poder instantáneo. A los 21 años, se convirtió en uno de los traficantes de drogas más importantes de su ciudad.

Pero cuando se empieza en negocios ilegales, tarde o temprano todo pasa factura. La suya llegó en forma de prisión. Fue condenado a casi 10 años de cárcel por tráfico de drogas y conspiración. Del día a la noche vio como se esfumaba su sueño de convertirse en un hombre con un alto poder adquisitivo con negocios ilegales. Su realidad era una celda en la que la única salida posible era volver a construirse interiormente.

Entonces Jeff empezó a redirigir sus aspiraciones. El cambio había comenzado. Lo que no esperaba Jeff es que su nuevo futuro pudiera estar relacionado con algo tan cotidiano como un fogón. En la cocina de prisión, empezó a vislumbrar que la forma en la que podría salir de su anterior vida era eso, cocinar.

El paso de la prisión a la subsistencia en la calle no debió ser fácil. Sin embargo, Jeff contaba con algo muy poderoso: el interés por seguir aprendiendo a cocinar y la determinación de cambiar de vida.

Como muchas veces comprobamos, al final el éxito viene por la suerte y por la constancia. No sabemos la proporción de estos dos ingredientes en la vida de Jeff, pero sí sabemos el sabor del resultado: se ha convertido en un exitoso cheff que ha dirigido restaurantes prestigiosos en lugares como Las Vegas.

Entre las mejores consecuencias que ha tenido el cambio de vida de Jeff, está la difusión que hace de lo que ha aprendido en su vida. Entre premio y premio que le otorgan como persona de éxito, el prestigioso cheff no deja de explicar que cambiar de vida depende de uno mismo.

Ahora, Jeff Handerson es una nueva voz de lo que llaman “auto- tranformación”. Y aunque la vida le sonríe, lo que más se puede valorar de él es que no ha escondido su pasado. Muchos hubieran ocultado o quizás negado que aprendieron su oficio en una prisión. Él no lo ha hecho. Al contrario, habla de su aprendizaje en la cárcel como el paso necesario para ser una persona nueva.

Si su testimonio puede servir para que al menos una persona que actualmente esté en la cárcel sepa que construir su nueva vida es posible, conocer su historia ha merecido la pena.

Escucha el testimonio de Jeff Handerson en Fin de Semana COPE con Cristina López Schlichting.