Paco González, sobre la defensa del Real Madrid: "Me acuerdo mucho de Ancelotti cuando decía que Nacho era un defensa pesimista"

Paco González realizó  en El Partidazo de COPE un crítico análisis de la victoria del Real Madrid 3-4 ante Olympiacos, centrando su atención en la pobre actuación defensiva del conjunto blanco. Para González, el rendimiento de la zaga ha sido sencillamente "lamentable", destacando una alarmante pasividad que ha manchado el resultado final.

Una defensa "optimista"

González ha tirado de ironía para describir la actitud de los defensores, a los que ha calificado como "todos optimistas" en contraposición a la definición que Ancelotti dio en su día sobre Nacho, al que llamó "defensa pesimista". Según el comunicador, en la zaga actual "todos piensan, bueno, no viene para el mío, le puedo dejar 2 metros, no hace falta que esté con él, le despejará al de atrás".

Lunin no ha agredido a ninguno de sus centrales hoy"

Paco González

Esta mentalidad, según González, se ha traducido en errores de bulto, comparando la actuación con la del partido del Metropolitano, donde los blancos cayeron 5-2. Ha explicado cómo, a pesar de tener hasta seis jugadores en el área, se quedaban "todos mirando cómo remataban". El periodista ha recordado también el primer gol encajado, en el que los rivales "entran tirando paredes entre 3 tíos, entre los centrales, y entre Choamaní y Camabinga".

Cualquier balón, todos parados, viendo cómo los valores para que los remataran los nueves del otro equipo, es extraordinario"

Paco González

Grandes elogios para Lunin

En medio de las críticas a la defensa, la figura del portero Andriy Lunin ha salido reforzada. Paco González ha afirmado que le da "mucho mérito" al guardameta, no solo por sus paradas, sino por su compostura. Con sarcasmo, ha añadido que lo más destacable es que "no ha agredido a ninguno de sus centrales hoy" pese a los flagrantes errores que cometieron.

La confusión de González se extiende al centro del campo del Real Madrid, que le tiene "muy despistado". Ha expuesto la inconsistencia del equipo, donde una medular con Güler y Ceballos no lograba sacar el balón, mientras que otra con Tchouaméni, Camavinga y Valverde, de la que se esperaba contención, permitía que "pasaba todo el mundo igual".

Finalmente, González ha cerrado su análisis con una advertencia en tono de broma, cuestionando si el problema son las camisetas rojiblancas del rival. "Si es eso el caso, el Girona también es rojiblanco, o sea, que cuidado", ha sentenciado, dejando un aviso para futuros compromisos del equipo.