Juanma Castaño, rendido ante Lamine Yamal por su partido en el España - Francia: "Las sensaciones dicen más"

El domingo en Múnich, ante Portugal, la Selección buscará su tercer título consecutivo después de una nueva exhibición del jugador del FC Barcelona

José Manuel Nieto

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España se cita con Portugal en la gran final de la Liga de Naciones tras una nueva exhibición de Lamine Yamal, el joven talento del FC Barcelona que volvió a ser decisivo en un partido de máxima exigencia. Con apenas 17 años, el extremo sigue acumulando méritos para colarse en la terna del Balón de Oro, y el periodista Juanma Castaño no ha dudado en rendirse a su actuación estelar frente a Francia: "Los números lo dicen todo. Y las sensaciones dicen más todavía".

Durante la última emisión de El Partidazo de COPE, Castaño analizó el rendimiento del jugador culé en el trepidante España - Francia que terminó con un espectacular 5-4, y que sirvió como antesala de la gran final del domingo en Múnich contra la Portugal de Cristiano Ronaldo. “Lamine ha metido dos goles, ha participado mucho en el juego ofensivo de España, y mucho... no, el día que más”, afirmó con énfasis, destacando el impacto de Yamal en un duelo que enfrentaba al talento emergente de España con el ataque temido de Francia, incluido Ousmane Dembélé, que pasó desapercibido.

El duelo contra Dembélé

En los días previos al partido, el enfrentamiento entre Lamine Yamal y Dembélé había sido uno de los focos mediáticos, alimentando el debate sobre los candidatos jóvenes al Balón de Oro. Pero como remarcó Castaño, "en ese duelo que se había generado... Dembélé absolutamente inédito". El atacante francés fue neutralizado por el bloque defensivo español, mientras que el barcelonista firmó una actuación de genio: un penalti provocado y convertido, un gol más tras un desmarque letal y una participación constante en cada jugada ofensiva de peligro.

EFE

Lamine Yamal observa durante el partido de fútbol de semifinales de la Liga de Naciones de la UEFA entre España y Francia, en Stuttgart.

En medio de un choque eléctrico, España volvió a mostrar esa identidad reconocible que la ha llevado a los últimos títulos. La victoria no solo reafirma su fortaleza en partidos decisivos, sino que consolida la figura de Yamal como uno de los grandes referentes del presente. Su irrupción hace recordar lo vivido en las semifinales de la Eurocopa, cuando también fue determinante contra los galos.

Vamos a ver si lo del domingo es esa final entre España y Portugal, ese duelo de nuevo de Lamine Yamal contra megas estrellas del fútbol”, se aventuraba Castaño con la vista puesta en Múnich. Y no es para menos: con jugadores como Vitinha, Neves o el eterno Cristiano Ronaldo enfrente, Yamal tendrá un último escaparate para cerrar la temporada con broche de oro y dar un golpe definitivo en la carrera por el galardón individual más prestigioso del fútbol mundial.

España quiere hacer historia en Múnich

El camino no ha sido sencillo. En Stuttgart, España aplastó a Francia con una primera parte memorable, que incluyó goles de Nico Williams, Pedri y dos de Yamal. El seleccionador Luis de la Fuente volvió a demostrar que su equipo llega fino a las citas importantes. Y aunque los últimos minutos del encuentro mostraron una preocupante relajación que permitió a Francia maquillar el marcador hasta un 5-4, el mensaje fue claro: la Roja está más viva que nunca.

EFE

Lamine Yamal (derecha) celebra el gol del 5-1 durante el partido de semifinales de la Liga de Naciones de la UEFA entre España y Francia, en Stuttgart.

La selección nacional está ahora a un solo paso de lograr su tercer título consecutivo, tras la Eurocopa 2024 y la anterior edición de la Liga de Naciones, algo que ninguna selección ha conseguido hasta ahora.

Con la vista puesta en el domingo, y un rival de prestigio como Portugal al frente, todas las miradas volverán a posarse sobre Lamine Yamal, ese joven que, partido a partido, parece decidido a escribir su nombre en la historia grande del fútbol europeo.

"Ese sí es el último partido de la temporada de Lamine Yamal. Es el último partido donde puede rascar un poquito de ese ansiado Balón de Oro", concluía Castaño. Y con razón: todo está en juego en Múnich.