El pleno del Ayuntamiento de Cartagena ha aprobado definitivamente la nueva Ordenanza municipal para la protección y tenencia de los animales de compañía en el término municipal de Cartagena.

El nuevo texto trata de erradicar los abandonos y las conductas incívicas al tiempo que se apela a la concienciación de la ciudadanía sobre tenencia responsable, maltrato y abandono.

Contempla novedades como el derecho de los ciudadanos a viajar en transporte público urbano con sus animales, cumpliendo con las condiciones establecidas en el texto y se refuerza el compromiso del Ayuntamiento de colocar fuentes caninas y la creación de nuevas zonas de esparcimiento canino.

Con la nueva noram municipal se pretende promover la colaboración ciudadana y de las entidades de protección animal con la Administración Loca; se perseguirán los abandonos y las conductas incívicas y crueles; al tiempo que se apela a la concienciación de la ciudadanía sobre tenencia responsable, maltrato y abandono.

Las modificaciones incluidas se dirigen a dar una mayor concreción de las obligaciones y prohibiciones de la tenencia responsable y bienestar animal, garantizando los tratamientos veterinarios de los animales que les sean necesarios, la obligación de alimentarles de forma adecuada para el mantenimiento de un estado óptimo de salud, y reforzando la prohibición en la práctica de mutilaciones sobre los mismos.

La nueva norma ha salido adelante con los votos a favor de los ediles del Gobierno y las abstenciones de MC y Unidas Podemos.

Desde este grupo la concejal Aroha Nicolás, cree que la ordenanza es mejorable y echa en falta aspectos como la mejora de parques caninos, la creación de un centro municipal para la proteccion animal y la regulación de establecimientos de venta de animales de compañía.

Los escritos presentados incluían un total de 53 alegaciones y sugerencias, que tras su estudio por los servicios técnicos municipales se ha propuesto la estimación total de tres de ellas y la parcial de otras 8, según ha detallado el concejal Manuel Padín, que ha recordado que era necesario actualizar la normativa municipal vigente desde 2003.